Punto polémico y momento de tensión en el Masters 1000 de Roma. Fue por un pelotazo de Cameron Norrie ante Novak Djokovic en el 2-2 del segundo set.
El británico se enfrentaba a una oportunidad de break y Nole, que daba ya por perdido el punto, se dio vuelta entregando la cancha. Norrie estrelló su smash en las piernas del serbio y la mirada hizo el resto.
Djokovic giró y, con cara de pocos amigos, se preguntó mil veces cómo hacer para no reaccionar. Punto polémico del día que, gracias a la templanza del número 1 del mundo, no se fue a mayores.
El británico, que ganó en Río de Janeiro su único título esta temporada y en polvo de ladrillo, levantó la mano a modo de disculpas pero el serbio hizo caso omiso.
El frío saludo en la red al final del encuentro dejó a la vista las sensaciones.