Holger Rune, sexto cabeza de serie, se clasificó para los cuartos de final del ATP 500 que se disputa sobre pista dura en Tokio. ¿La curiosidad? Le ganó a un japonés y va contra uno de la misma nacionalidad. Inusual si se tiene en cuenta que Japón no tiene tantos jugadores a nivel profesional. De hecho hay dos entre los primeros 100 del ranking mundial, cuatro entre el 100 y el 200, tres entre el 200 y el 300, cuatro entre el 300 y el 400 y dos entre el 400 y el 500. Es decir, 15 entre los mejores 500 del mundo.
El danés se deshizo en el último partido de la jornada al local Yoshihito Nishioka por 6-2 y 6-4. En la primera manga el nórdico se mostró implacable con su servicio, firmando nueve 'aces' y un 100% de puntos ganados con su primer servicio pese a desperdiciar hasta dos pelotas de set el séptimo juego que le hubieran permitido cerrarlo todo antes. Ya en la segunda un 'contrabreak' en el noveno juego, sumado a la rotura previa en el tercero, decantó la balanza a su favor.
Su rival en siguiente ronda será Kei Nishikori, que sigue sacando rédito a la invitación recibida para disputar el evento, y se deshizo en octavos del australiano Jordan Thompson por 6-2 y 6-3 gracias a su efectividad para aprovechar 5 de las 7 pelotas de rotura de las que dispuso.
La gran sorpresa del día llegó con la eliminación de Tommy Paul a manos del checo Tomas Machac por 2-6, 6-3 y 7-6. El estadounidense comenzó dominando, si bien tuvo que salvar hasta cinco puntos de break en contra en el primer set. En el segundo fue su rival el que se enfrentó a ese sufrimiento al esquivar nueve de diez oportunidades para perder su servicio y aprovechar las dos que tuvo. En el tercero y definitivo la pérdida del saque del de Nueva Jersey en el quinto punto del 'tie break' terminó por decantar la balanza.
Machac jugará ahora frente al también estadounidense Alex Michelsen quien, en un duelo entre tenistas procedentes de la previa, se impuso al australiano Christopher O'Connell por 6-1 y 6-4 tras salvar las tres pelotas de rotura que tuvo el contrario y mostrarse más sólido que este con el saque.