Luego de considerar la posibilidad de tomarse un descanso por malos resultados, el kazajo Alexander Bublik (30°) recuperó el disfrute dentro de una cancha en los últimos meses, período en que levantó considerablemente al alcanzar cuartos de final en Roland Garros y levantar tres títulos, dos sobre polvo de ladrillo en semanas consecutivas, en los ATP 250 de Gstaad y Kitzbuhel.
Pese a maldecir en diversas oportunidad la superficie anaranjada, el nacido en Gatchina, Rusia, de 28 años, se amigó considerablemente en la previa de la gira norteamericana sobre pista dura, hilvanando coronaciones en el evento suizo y austriaco al derrotar al argentino Juan Manuel Cerúndolo (81°) y al francés Arthur Cazaux (100°), respectivamente, en la definición.
"No puedo creer lo que hice porque probablemente han sido las dos semanas más difíciles de mi vida. Venir de Gstaad y jugar aquí con condiciones diferentes todos los días, lluvioso. Estoy muy feliz por haberlo logrado. Muchas gracias chicos por apoyarme durante todo el torneo, trajeron la alegría a la cancha y mantuvimos la frescura", manifestó el gigante diestro, de 196 centímetros de estatura, después de vencer 6-4 y 6-3 para coronar otra semana inolvidable en el circuito masculino.
Posteriormente, el ex númreo 17 del mundo se tomó un momento para felicitar al oriundo de Montpellier, de 22, el cual había dejando en el camino al albiceleste Francisco Comesaña (73°) y al peruano Ignacio Buse (133°), entre otros: "Sabía que él estaba jugando la semana de su vida, su primera final. Esta es mi 14° final, recuerdo la primera como si hubiese sido ayer. Fue muy muy duro desde mi lado, le deseo todo el éxito, juega increíblemente. Por suerte aproveché mis chances".
"Si juega de esta manera conseguirá muchas cosas. Te conozco desde hace algunos años en el Tour, has estado mejorando constantemente y espero que continúes así", prolongó el undécimo en la Race, quien había comenzado la racha al superar al ruso Daniil Medvedev (14°) en la final del ATP 500 de Halle.
Por último, Bublik, que se bajó del Masters 1000 de Toronto a último momento y seguramente regresará a la competencia en Cincinnati, concluyó: "Mi equipo sabe cuán difícil fueron las últimas dos semanas. Todos los días me quejaba de que no se podía jugar pero afortunadamente lo logré. Y para continuar la tradición, este va para mi amada esposa. Te amo".