Alex Michelsen se salvó. Resulta cruel pero es una gran verdad dicha con sus propias palabras: "Si no hubiera sido por el COVID, porque gracias a ello pude estudiar en casa. Salvó mi carrera tenística para ser honesto. Porque fue entonces cuando comencé a jugar cinco horas al día".
Así empezó, así va y solo el tiempo dirá cómo terminará: "No me consideraba un tenista un profesional, pero sabía que era bastante bueno. Estaba entre los cinco mejores de mi clase. Luego comencé a jugar algunos torneos Futures y me dije a mí mismo: ‘Espera, puedo ser como todos estos chicos’. Empecé a engañarme a mí mismo y a pensar que podía ser un profesional. No sé, nunca habría sido así".
En una entrevista en el podcast "Nothing Major Show", presentado por Sam Querrey, John Isner, Steve Johnson y Jack Sock, el actual 36° del ranking ATP dejó una interesante reflexión sobre la cuarentena y lo que vino después: "Era un jugador mediocre, y entonces empecé a participar en torneos. Estaba en el puesto 500 del ranking, y llegué a la final del Challenger y pensé: 'Espera, puedo con esto'. Pero mis padres querían que siguiera estudiando, y solo tenía un tiempo limitado para triunfar".
Mientras tanto sigue buscando dar el paso definitivo para dejar la etiqueta de "promesa" del tenis estadounidese. Para ello, necesita regularidad, algo que le está faltando en este 2025. Marca de 22-24 (sin victorias en los últimos 5 partidos).
Pero, como ya se va terminando la temporada, queda barajar y dar de nuevo. Salvarse de nuevo.
