El intento de Lamar Odom por relanzar su carrera en el basquetbol duró sólo un juego.
El dos veces campeón en la NBA, cuya carrera y vida se descarrilaron por la adicción a las drogas, fue uno de los cuatro ex jugadores de la NBA que fueron “desactivados” para el resto de la temporada por la Big3, liga de 3 contra 3 creada por Ice Cube.
De acuerdo a personas con conocimiento de la situación, Odom, Jermaine O’Neal, Bonzi Wells y Byron Davis fueron desactivados por razones competitivas y no por problemas extra deportivos.
De acuerdo a una fuente, Odom “no estaba a la altura competitiva”.
El año pasado, Odom anunció que jugaría en la edición 2019 de la Big3. El jugador de 39 años jugó por última vez en la NBA con los LA Clippers durante la temporada 2012-13. Fue hospitalizado tras ser encontrado inconsciente en un burdel de Las Vegas tras una sobredosis en 2015. Para ese entonces, su relación de alto perfil con la estrella de televisión Khloe Kardashian había terminado.
De acuerdo a Odom, sufrió seis derrames y 12 ataques al corazón mientras estaba en coma tras la sobredosis.
La Big3 no especificó la razón para las desactivaciones al sólo indicar que esos movimientos están ligados al deseo de la liga de “maximizar la competencia, proteger la salud de los jugadores y aumentar el nivel de profesionalismo”.
Odom dijo estar listo para su regreso a las duelas tras ser nombrado cocapitán de la escuadra The Enemies, pero, tras batallar en su primer juego, señaló en una entrevista que “una vez que entre en ritmo, no debe haber problema”.
En su tercera campaña, la Big3 ha aumentado el nivel de competencia y avanzó de ser una liga de tipo callejera para ex profesionales a ser una organización que le da a elementos como Royce White, ex selección de primera ronda, una posible plataforma que lo regrese a la NBA.
Joe Johnson, seleccionado siete veces al Juego de Estrellas, ha sido el jugador más destacado en la actual temporada al ser el líder anotador de la liga.