BOSTON -- No fue una noche sencilla para los Medias Rojas en Fenway Park durante el segundo juego de la Serie Divisional de la Liga Americana. Tras vencer en el primer encuentro de la serie ante los Yankees de Nueva York, Boston no pudo hacer nada contra un conjunto neoyorquino que aprovechó muy bien el poder de sus grandes bateadores contra un flojo David Price, quien como inicialista mantuvo su terrible racha contra los Bombarderos Bronx y fue relevado en la segunda entrada tras sólo aportar cinco outs y permitir dos jonrones y tres carreras limpias. El abridor Masahiro Tanaka y el bullpen de los neoyorquinos, por su parte, hicieron el resto ante una ofensiva inoperante de los Medias Rojas.
El ambiente en el clubhouse de Boston tras el encuentro estaba bastante decaído. Los muchachos de Alex Cora estaban convencidos de salir de la ciudad con el 2-0 bajo el brazo, por lo que ahora deberán recomponerse anímicamente de cara al resto de la serie. Tras el mal arranque de Price en el juego y la inexistente producción de su ofensiva, es normal que el manager boricua se haya llenado de dudas. Aunque no todo son malas noticias.
Sus tres receptores, Sandy Leon, Christian Vázquez y Blake Swihart, han demostrado a lo largo de la temporada estar completamente preparados para llevar el peso de los partidos detrás del plato cuando sean requeridos, aunque quizás el debate verdaderamente exista de momento sólo entre decantarse por el boricua o por el venezolano, quien por ahora parece ir ganando la partida a sus compañeros en este arranque de la postemporada.
León volvió a iniciar como catcher en el segundo juego de la Serie Divisional contra los Yankees, confirmando así que su manager confía plenamente en él de cara al momento crucial de la temporada de los Medias Rojas. En el primer partido de la serie, el venezolano fue clave para afianzar la victoria sobre los Yankees por 5-4, con muchas jugadas de mérito ante picheos bastante pobres por parte de la mayoría de los relevistas, y aunque en el segundo partido poco pudo hacer para ayudar al cuestionable bullpen del equipo de Boston, él se mantiene optimista de cara al resto de la serie.
''Gracias a Dios ganamos el primer partido y nos llevamos el 1-1 para Nueva York'', dijo el venezolano tras el partido del sábado en Fenway Park a ESPN Digital. ''Ahora tenemos que descansar mentalmente mañana [domingo] y estar listos para darlo todo de nuevo el lunes''.
La situación del venezolano es cuando menos interesante, pues en realidad era su compañero Vázquez quien estaba llamado a ser el catcher principal de este equipo. El boricua no sólo arrancó mejor el año sino que además tiene mejores números que el de Maracaibo al bate, con una media de .207 por los .177 de León. Lo cierto es que de ninguno de los dos se espera que se conviertan en los héroes ofensivos del equipo, por lo que el manager Cora parece haberse decantado por la seguridad que le da a sus pitchers el venezolano. Sin embargo, León no ve la situación tan definida, y hace hincapié en que todos deben remar en la misma dirección.
''Tenemos catchers muy buenos y cualquiera de nosotros podemos hacer el trabajo. Bien sea Christian, bien sea Swihart, lo importante es que quien salga al campo lo haga lo mejor posible y ayude al equipo a ganar, que es lo que todos buscamos. Nosotros tres hemos rotado todo el año y nos ha ido muy bien, por eso lo más importante es comunicarse mucho entre nosotros y que, catchée quien cathchée, nos apoyemos unos a otros'', acotó el receptor.
Para Vázquez --el contrapunto en esta ecuación-- lo que podría ser un problema o llegar a convertirse en una rivalidad no lo es tanto, pues él también dice estar enfocado en el bien del equipo más allá de que le toque a jugar o no. Aunque es obvio que a nadie le gusta verse fuera del equipo en los momentos importantes, el boricua parece haber encajado el golpe con deportividad hasta el momento y espera ansioso su oportunidad.
''Yo quiero ganar. Hoy no jugué y cuando me toque lo haré lo mejor posible, estaré preparado. Al final es Alex quien decide quién tiene que jugar y nosotros nos dedicamos a acatar la decisión y jugar'', comentó el catcher boricua. ''Aquí somos un gran grupo de profesionales, hay gente de mucha calidad, por lo que al final el que sale ganando es el equipo y el aficionado. Eso no va a cambiar juegue quien juegue''.
Poder contar con dos receptores tan confiables --además de Swihart, el tercero en discordia-- es algo de lo que no todos los equipos pueden presumir, y para los Medias Rojas esta rotación ha sido muy importante esta temporada. Al inicio del año parecía que Vázquez sería quien llevaría el peso de la mayoría del campeonato tras el plato, sobre todo después de firmar la extensión de su contrato a razón de $13.3 millones por los próximos tres años. Sin embargo, una fractura del dedo meñique de su mano derecha le mantuvo en la lista de lesionados durante dos meses, tiempo que León supo aprovechar para demostrar sus dotes defensivas y, además, ganarse la confianza de la mayoría de pitchers del bullpen de Boston.
''No sé cuántos lanzadores tuvimos en el juego, pero para comandarlo como lo hizo... tienes que ser muy bueno'', dijo el derecho Rick Porcello sobre el receptor venezolano tras el primer juego de la Serie Divisional entre los Yankees y los Medias Rojas. ''Todos tenemos mucha confianza lanzándole. Sandy ha sido quien ha mantenido al bullpen conectado todo el año''.
Las cosas no salieron tan bien en el segundo juego de la serie como en el primero para los Medias Rojas, que ponen rumbo a Nueva York con la necesidad de --cuando menos-- sacar una victoria del Yankee Stadium para volver a intentar finiquitar la serie en casa en el quinto juego, aunque el receptor venezolano hizo lo que pudo para ayudar a un bullpen venido a menos tras el horrible arranque de Price en el montículo.
Los que conocen a León, y conocen su forma de prepararse para los partidos, hablan de un hombre sumamente metódico que aporta muchísimo en las reuniones de picheo durante la semana. Es justamente esa atención al detalle lo que ha hecho que, a pesar de sus números al bate, Cora haya decidido poner su confianza en el venezolano.
De cualquier manera, esto tampoco significa que Vázquez haya dicho la última palabra en lo que ha participar en el equipo en esta postemporada se refiere. El boricua confía mucho en la sabiduría de Cora como manager --hacia quien además profesa una gran admiración y orgullo como puertorriqueño--, por lo que no pierde el tiempo haciendo cábalas: sólo le queda esperar pacientemente su oportunidad.
''Ser el segundo manager boricua en Grandes Ligas es muy importante, y para mí es especial estar en su equipo'', comentó Vázquez. ''Me ha impactado su forma de comunicarse con nosotros, nos ayuda mucho. Por eso nos ha sabido llevar tan bien como ha hecho hasta ahora. Él conoce al equipo mejor que nadie, por lo que sabe qué jugador puede aportar más en cada momento'', comentó en clara alusión a sus posibilidades de rotar con Sandy León detrás del plato.
Ahora mismo le ha tocado a León iniciar en esta serie divisional, pero la situación podría cambiar en cualquier momento. Ambos catchers existe aseguran tener una relación bastante profesional, que además Sandy dice les beneficia a los dos y al equipo. ''Hablamos mucho. Nos ayudamos. Si tenemos dudas sobre algún lanzamiento o sobre algún bateador, siempre nos preguntamos el uno al otro, y pienso que eso es muy importante. Nuestra comunicación antes del juego, durante el juego y después del juego es clave'', aclaró el venezolano.
De lo que no queda duda es que el puesto de catcher es uno por el cual Cora no tiene que preocuparse demasiado. Sea cual sea su decisión en los días de partido, el plato estará bien cubierto. Y la verdad es que, tras ver el rendimiento del equipo en el segundo partido de la Serie Divisional, mejor haría Cora en enfocarse en lidiar con otros aspectos más problemáticos en su equipo, como por ejemplo la producción de sus lanzadores.