Horas antes del arranque de la actividad el GP de Mónaco, séptima fecha de Fórmula 1 que se vivirá por Star+ (para Latinoamérica), una bomba explotó en el mundo de la categoría: Lewis Hamilton podría seguir su carrera en Ferrari. La noticia, per se, ya conmociona, porque sería la separación del inglés de Mercedes-Benz, marca con la que tuvo relación en todas sus temporadas del Mundial (arrancó en McLaren, con motor de las Flechas). Pero, además, el sacudón es por el lugar al que se mudaría, el único equipo con presencia perfecta en las 74 temporadas. Y si a todo eso se le suma la cifra que pondrían sobre la mesa de negociación…
La Rossa arrastra una pesada carga de 16 años sin títulos de pilotos (desde Kimi Räikkönen 2007) y 15 sin festejar en Constructores (2008). Desde entonces, más allá de haber luchado hasta el final en los Mundiales de 2010 y 2012 (con Fernando Alonso) y de 2017 (con Sebastian Vettel), la Scuderia nunca más volvió a ser el equipo dominador de la Fórmula 1. Los fríos números marcas que desde 2009, la marca de Maranello ganó 31 de los 281 Grandes Premios disputados. Poco para una escuadra con tanta grandeza. Después de un 2022 que arrancó con ilusión y se terminó en una dura decepción, los popes del Cavallino decidieron meter mano y removieron a Mattia Binotto de su cargo de director para reemplazarlo por Frédéric Vasseur. El francés se tomó su tiempo, pero empezó a meter bisturí en las principales cabezas de la estructura; entre otros desplazó a David Sánchez, el encargado de diseñar el SF-23 que tan poco competitivo se mostró en las cinco carreras disputadas de 2023.
Con este panorama, Ferrari quiere dar un golpe sobre la mesa. El contrato de Lewis Hamilton con Mercedes se vence al cierre del actual ejercicio y, si bien Totto Wolff ya avisó varias veces que están detrás de la renovación y a largo plazo, la firma no llega. Y ahí aparece el team italiano con una oferta que hace temblar a cualquiera: ¡40 millones de libras por temporada! Los medios italianos aseguran que el acuerdo debería cerrarse en el verano europeo. Si se cierra el contrato, el inglés ocuparía el lugar de Carlos Sainz, quien tiene vínculo con la Scuderia hasta fines de 2024. Pero…
Si bien este año el español fue mucho más productivo que Charles Leclerc, siempre propenso al error y a la rotura de autos contra muros, el monegasco cuenta con la protección de John Elkann, CEO de Ferrari, quien lo tiene como el piloto del futuro del team. Entonces, los autos rojos sueñan con formar la dupla Hamilton-Leclerc y que el inglés logre su octavo título con el Cavallino.