Todo comenzó con la pista mojada, que se fue secando a medida que avanzaba la tanda y el inglés de Mercedes se quedó con lo mejor.
Totalmente alocado fue el tercer entrenamiento del GP de Las Vegas, 22ª fecha de Fórmula 1. Esta vez no fue una alcantarilla el problema, como había ocurrido en la primera jornada, cuando se perdieron 21 minutos de sesión por una tapa de desagüe suelta en la curva 17 (debieron reforzar otras 14 antes del comienzo del segundo día). La actividad se vio complicada por la naturaleza: la fuerte lluvia caída durante le día convirtió la sesión final de práctica en una ruleta, justamente en la ciudad del pecado. Y el pleno fue para George Russell, el más veloz.
La pista formó un combo que se convirtió en un jeroglífico: fría, mojada y lavada. Así, cuando se habilitó a los autos a salir, fueron haciéndolo de a poco. No era cuestión de arriesgar en un trazado urbano en el que los muros están a centímetros. Todos los valientes iniciales salieron con neumáticos de lluvia intermedia, con la idea de dar unos giros y secar el asfalto. Pero no había caso, no se secaba.
Los tiempos absolutamente dispares respondían a la condición de pista. Hasta que Lando Norris fue el primero que asumió el riego de poner neumáticos lisos blando. Extraña la decisión de McLaren porque el inglés es que el que menos debe ponerse en peligro al ser el líder del Mundial a tres citas del cierre. “No tomes riesgo”, le dijeron por radio cuando salió de boxes. Entonces, ¿para qué le pusieron esos neumáticos? Insólito. El británico tuvo que controlarlo un par de veces para no perder su MCL39 y optó por no arriesgar más. Así fue que el alocado tercer ensayo dejó a los dos autos de Woking en el fondo. Sí, 19º y 20º.
Adelante, los tiempos iban bajando a medida que se acercaba el final de la sesión, cuando el asfalto estaba más seco y los pilotos se la jugaban un poquito más. Así, el inglés de Mercedes marcó 1m34s054 para quedarse con lo mejor, por delante de Max Verstappen (a 227 milésimas). De ahí para atrás, diferencias de tiempo ilógicas. Alex Albon fue tercero, a 821 milésimas, e Isack Hadjar fue cuarto, a ¡1s115! Alocado, completamente.
El final de la sesión se tenía guardado el ballet. Bloqueada de Gabriel Bortoleto, pasada de largo de Verstappen, Pierre Gasly metiendo trompo… Un rato antes Lewis Hamilton casi se lleva puesto a Liam Lawson, Charles Leclerc también anduvo pasado, Fernando Alonso… Totalmente alocado todo. Y en el ambiente quedó flotando un dato preocupante: se anunciaba lluvia para un rato antes de la clasificación. La pista para la qualy puede llegar a estar más fría y mojada. La ruleta de Las Vegas se prepara, hagan sus apuestas.
