Aiyuk se une a la estrella de los Dolphins Tyreek Hill como los quintos receptores mejor pagados de la NFL
SANTA CLARA, California -- La dramática montaña rusa que han sido las negociaciones contractuales de alto riesgo entre los San Francisco 49ers y el receptor abierto Brandon Aiyuk terminó donde todo comenzó hace más de seis meses: con los Niners y Aiyuk manteniéndose unidos por mucho tiempo.
Brandon Aiyuk y los Niners acordaron el jueves los términos de una extensión de contrato de cuatro años y 120 millones de dólares que lo mantendrá en San Francisco hasta la temporada 2028, señalaron fuentes a Adam Schefter de ESPN.
Es el mismo acuerdo que ha estado sobre la mesa de los 49ers desde el 12 de agosto, comentaron fuentes de la liga a Adam Schefter.
Brandon Aiyuk se une a la estrella de los Miami Dolphins Tyreek Hill como los quintos receptores mejor pagados de la NFL con un valor anual promedio de 30 millones por temporada.
El acuerdo llega poco después de quizás el movimiento más polémico hasta ahora en estas negociaciones, ya que los Niners declararon públicamente que Aiyuk estaba sano el miércoles, y el entrenador Kyle Shanahan y el gerente general John Lynch dijeron que esperaban que participara en la práctica.
Brandon Aiyuk no practicó el miércoles ni el jueves, lo que lo expuso a la posibilidad de una sanción del equipo. Sin embargo, el acuerdo del jueves garantiza que Aiyuk pueda pasar los próximos 10 días preparándose para el partido inaugural el 9 de septiembre contra los New York Jets.
Durante casi dos años antes de que se finalizara la extensión, los Niners sostuvieron que siempre tuvieron la intención de firmar a Aiyuk. Hubo muchas dudas sobre ese resultado en las últimas semanas después de que el receptor abierto solicitara un intercambio justo antes del inicio del campo de entrenamiento el 23 de julio.
No mucho después, los Niners, por primera vez, parecieron serios acerca de intercambiar a Aiyuk.
Con un fuerte interés de los Pittsburgh Steelers, Cleveland Browns y New England Patriots, los 49ers y Aiyuk evaluaron sus opciones. Para que un acuerdo funcionara, un equipo tendría que satisfacer tanto a los Niners como a Aiyuk, con sus demandas de una lucrativa extensión de contrato.
Aunque cada uno de esos equipos aparentemente cumplía con una de esas condiciones, ninguno pudo cumplir con ambas, lo que ayudó a los Niners y a Aiyuk a volver a la mesa de negociaciones y resolver sus diferencias.
El resultado fue un acuerdo largamente esperado que garantiza que el mejor receptor abierto de los Niners no se vaya a ninguna parte mientras San Francisco busca el sexto Trofeo Lombardi de la franquicia, que lo ha eludido por poco en cuatro de las últimas cinco temporadas.
Ahora los Niners no solo tienen a su mejor receptor para ir por el Super Bowl, sino que pueden mantenerlo con el mariscal de campo Brock Purdy como parte de la base ofensiva principal del equipo para los próximos cinco años.