NEW ORLEANS -- El juicio del presunto asesino de Will Smith inició de forma dramática el martes, con algunos de los compañeros del ex jugador de los Saints, como Drew Brees y Steve Gleason, presentes y con el testimonio de su viuda, Racquel, durante dos horas llenas de emociones.
En un punto del testimonio, Racquel se dirigió directamente a Cardell Hayes, acusado de dispararle a ella en ambas piernas y luego dispararle ocho veces a su esposo –siete en la espalda- tras una fuerte discusión entre ambos hombres y algunos de sus acompañantes.
“Mi peor pesadilla se hizo realidad. Sin razón. (Cardell) no tenía por qué hacer eso a mi nene”, dijo Racquel tras detallar el incidente.
Entonces, Racquel volteó a ver a Hayes y dijo, “¡Y tu lo sabes! O a mí. No te hice nada”.
Racquel detalló los dos incidentes de tráfico y la confrontación con gritos y groserías que terminó en el tiroteo. El primer incidente fue un potencial choque y huida, en el cual, el vehículo de Smith quizá haya golpeado la parte trasera del auto de Hayes.
El segundo incidente sucedió minutos mas tarde, cuando el vehículo de Hayes golpeó la parte trasera del auto de Smith –lo que pudo ser intencional o accidental, de acuerdo a las narrativas de ambas partes.
Racquel admitió que su esposo estaba molesto y no tranquilo cuando discutía con Hayes, pero la fiscalía recalcó que Hayes fue el único de los dos que salió de su auto con una pistola en la mano.
Racquel también reconoció que tuvo que calmar a su esposo y que lo hizo al recordarle los nombres de sus tres hijos y al decirle, “Esto no vale la pena”. Sin embargo, dijo que Will la miró a los ojos, le dio la razón y comenzaron a alejarse del lugar antes de los disparos.
Racquel declaró que escuchó dos disparos y no se dio cuenta de que había sido herida en las piernas hasta que sintió un fuerte ardor y que no supo cómo fue que logró resguardarse del otro lado del auto y “hacerse la muerta” ante el temor de que quien le disparó fuera tras ella.
Relató que, entonces, escuchó cinco disparos más y que escuchó la voz de un hombre gritando, “¿Quieres presumirle al tipo blanco?”, al referirse a uno de los acompañantes de Smith, y que luego volvió a gritar para decir, “¡Mírate ahora!”.
Racquel dijo que la voz se escuchaba “fuerte, enojada y malévola”.
Racquel fue emotiva en ocasiones, pero también desafiante durante su testimonio. En una de sus primeras declaraciones hizo referencia a que uno de los abogados de la defensa sugirió que el jurado sentiría simpatía hacia ella, a lo que respondió, “No quiero simpatía. Quiero justicia”.
También tuvo dos o tres tensos intercambios de palabras con el abogado defensor John Fuller. En un momento, Racquel dijo que no fue la mirada de su esposo la que le hizo temer que algo sucediera sino la mirada de Hayes y su amigo Kevin O’Neal.
En ese momento, Fuller aumentó el tono de su voz y señaló que Hayes y O’Neal habían estado más tranquilos que su esposo durante el incidente, lo cual no tendría sentido si Hayes supuestamente es “un asesino agresivo”.
A esto, Racquel respondió: “Lo vi en los ojos de todos. Primero, soy madre. Intento frenar todas las situaciones porque tengo miedo. No tenía que suceder lo que pasó. Todos en ese lugar sabían que no tenía que suceder”.
El tema clave en juicio será la disputa sobre qué parte es considerada la “agresora”, pues Hayes señala que actuó en defensa propia.
La fiscalía ha insistido que Hayes fue el agresor por haber chocado el auto de Smith y por ser el único que tenía un arma en la mano.
Sin embargo, la defensia ha recalcado que Smith y Hernandez actuaban errática y agresivamente –con Smith golpeando a Hayes- antes de que Smith les advirtiera que iba a su auto para sacar su propia pistola para, “Mostrarte qué hacer con ella”, al dirigirse a Hayes.
La defensa alega que Hayes no comenzó a disparar hasta después de que Smith se introdujo a su vehículo, abrió la guantera y comenzó a voltearse hacia él. Y el abogado defensor Jay Daniels dijo que la ley le permite a Hayes dispararle a Smith porque “razonablemente cree que su vida estaba en peligro”.
“Cardell actuó. No le emociona haberlo hecho”, dijo Daniels. Pero tiene un hijo, tiene familia, también”.
Sin embargo, la fiscalía y Racquel afirman que Smith nunca camino hacia su vehículo y que se alejaba del incidente cuando recibió los disparos.
No se han presentado evidencias de que Smith haya tenido en su mano o haya disparado su arma. Un detective de homicidios testificó que los casquillos en la escena coincidían con el calibre de la arma de Hayes y el fiscal señaló que todos estaban cerca del vehículo de Smith y no cerca del auto del hombre que “alega defensa propia”.
Sin embargo, la defensa le hizo preguntas al detective sobre los exámenes por residuos de pólvora en las manos de Smith, sobre la guantera abierta en su vehículo y sobre la evidencia en video sobre la forma en que actuó en varios bares y restaurantes durante aquél día.
Otros expertos testificarán sobre estos temas durante el juicio.
La pistola de Smith fue encontrada dentro de su auto, entre el asiento del conductor y el descansabrazos central. Racquel testificó que normalmente guardaba la pistola en la guantera, pero que ese día la había sacado de la bolsa de su pantalón para no cargarla en el Festival del Barrio Francés y rápidamente la puso en la puerta del conductor.
Ambas partes también están en desacuerdo sobre si Hayes frenó o no cuando chocó el auto de Smith, algo que los expertos examinarán más adelante en el juicio.
Y ambas partes están también en desacuerdo sobre si Hayes tenía o no su pistola en la mano cuando salió de su auto.
La fiscalía, sin embargo, no disputó que Smith estuviera intoxicado al momento del incidente y dijo que Racquel y la familia desearían estar en la corte por un caso de arresto por conducir en estado de ebriedad y no por uno de asesinato.
Y por primera vez, la fiscalía confirmó que el ex corredor de los Saints, Pierre Thomas, estaba en el lugar al momento del tiroteo, en un auto ligeramente delante de los tres vehículos involucrados en el asunto, lo que pone al menos a seis personas del lado de Smith en la escena y sólo dos del lado de Hayes.
Ninguna de las partes hizo a un lado la popularidad de Smith y su peso como figura pública como ex jugador de los Saints.
El asistente de la fiscalía, Jason Napoli, lo mencionó de inmediato al iniciar sus argumentos al decir, “Conocimos a Will por la defensiva. Irónicamente, murió de forma totalmente opuesta. Murió indefenso”.
A su vez, Daniels dijo al iniciar su argumento: “La fantástica carrera en el futbol americano del Sr. Smith” y su trabajo caritativo no están a juicio.
Fuller también se mofó de los intentos de la fiscalía por reforzar el estatus de Smith con los Saints.
El ex corredor de los Saints, Deuce McAllister, amigo cercano de Smith, fue el primero en testificar en carácter de testigo. Fuller le preguntó si testificaba como “un famoso jugador de los Saints” y destacó que la foto que la fiscalía usó para que McAllister identificar a Smith fue una en el Superdome con Smith y otros jugadores uniformados.
Napoli respondió mostrando una foto de McAllister y otras personas cargando el ataúd en el funeral de Smith y dijo, “¿Está bien su nos tomamos cinco minutos para hablar del tipo de persona que (Smith) era?”.
McAllister comenzó a sollozar mientras describía la personalidad de Smith y recordaba que sus hijos asistían a la misma clase.
McAllister fue uno de los seis ex compañeros de Smith que asistieron al primer día del juicio junto con Brees, Gleason, Roman Harper, Jhari Evans y Fred McAfee.