El corredor Derrick Henry, de los Titans, tuvo el mejor desempeño de la jornada dominical en camino a un récord histórico de la NFL
La Semana 14 fue una de esas semanas. Sí, una de esas semanas en la que abundaron las actuaciones individuales extraordinarias a lo largo y ancho de la NFL.
Decía Santana Moss: "Big-time players make big-time plays in big games" (Los grandes jugadores realizan grandes jugadas en grandes partidos), y eso parece haber sido la norma este domingo, al tiempo que múltiples estelares aportaron lo suyo para darle forma al panorama de postemporada:
Derrick Henry, corredor Tennessee Titans
El rey reclama su corona.
Después del descalabro sufrido la semana pasada ante los Browns, si algo requerían de manera imperiosa los Titans, era echar a andar la máquina con el jersey N° 22, y eso fue justamente lo que consiguieron ante los Jags.
Henry, quien apenas pudo acumular 15 acarreos la semana pasada, cuando Tennessee se vio obligado a desviarse de su usual plan de juego, llevó hoy el balón en 26 ocasiones para 215 yardas y dos touchdowns, promediando un increíble 8.3 yardas por intento, en la vapuleada que le propinaron los Titans a Jacksonville.
De paso, Henry se apuntó otro récord de la liga, convirtiéndose en el único jugador en la historia de la NFL en acumular cuatro partidos con al menos 200 yardas y dos touchdowns por tierra en su carrera, dejando atrás el empate que tenía con Jim Brown, Barry Sanders y LaDainian Tomlinson.
Esa no es cualquier compañía. Todos ellos, son dueños de una chaqueta dorada.
El actual líder de la NFL con 1,532 va que vuela a su segundo título como campeón corredor de la liga, después de acumular 1,540 el año pasado. Con tres partidos por disputarse, está a 8 yardas y dos touchdowns de superar su producción del año pasado, lo que debe preocupar al resto de la liga: Henry está mejorando.
Menciones honoríficas
T.Y. Hilton, receptor abierto, Indianapolis Colts. Los Colts no gastaron mucho tiempo en abrir distancias en el marcador con respecto a los Raiders, y Hilton fue clave en ello. En el primer periodo, anotó el primer touchdown del juego para poner arriba a Indy por 10-0, y en el segundo volvió a cobrar, para dejar a los Colts con ventaja de 17-10. Se fue con cinco recepciones para 86 yardas en total, con las dos anotaciones, en un partido muy productivo para la defensiva de Indianapolis.
Jalen Hurts, quarterback, Philadelphia Eagles. Los Eagles se decidieron al cambio y los resultados no pudieron resultar mejores. Hurts completó 17 de 30 envíos para 167 yardas con un touchdown, pero también corrió el ovoide 18 veces para 108 yardas contra un rival que no había permitido a nadie superar las 100 yardas por tierra en 50 partidos. De repente, Philly mostró algo de vida con Hurts, aunque inexplicablemente, Doug Pederson, fiel hasta la muerte con Carson Wentz, se negó a confirmar al novato como titular para la semana entrante.
Drew Lock, quarterback, Denver Broncos. Con toda seguridad, Lock sintió la sofocante presión de sus malas salidas de media temporada, y escuchó toda la discusión respecto a la necesidad de los Broncos de encontrar a otro quarterback para el futuro, porque ofreció su mejor partido como profesional esta tarde, completó 21 de 27 envíos para 280 yardas con cuatro touchdowns y cero intercepciones. Lo único negativo es que sufrió dos balones sueltos, uno de ellos perdido, en la victoria de Denver sobre Carolina.
Haason Reddick, linebacker, Arizona Cardinals. Reddick se despachó con la cuchara grande, acumulando cinco capturas de quarterback sobre Daniel Jones e imponiendo, en el proceso, una nueva marca de franquicia para Arizona. Llegó un momento en que el linebacker parecía un elemento olvidado en el esquema defensivo de los Cards, después de ser elegido en la primera ronda del draft, pero ahora el defensivo posee una gran tarjeta de presentación para encontrar su nicho, ya sea en el desierto o con otro equipo.
Aaron Rodgers, quarterback, Green Bay Packers. Aparentemente, se acabaron los partidos malos que tenía previsto Rodgers para el 2020. El quarterback de los Packers completó 26 de 33 intentos de pase para 290 yardas y tres touchdowns sin intercepciones, y por si eso fuera poco, se anotó otro touchdown por tierra en la victoria de Green Bay por Detroit que los tiene, momentáneamente, en el primer sitio en la siembra de la NFC. A la Semana 14, Rodgers debe ser considerado el favorito para ganar el premio de Jugador Más Valioso.
Miles Sanders, corredor, Eagles. Con 115 yardas y dos touchdowns en apenas 14 acarreos, además de otras 21 yardas en cuatro recepciones, Sanders puso su granito de arena en la sorpresiva victoria de Philly sobre los Saints que hizo sonreír a toda la afición en Green Bay. Cuando un corredor es efectivo, abre opciones para quarterbacks que lo saben aprovechar con las piernas, y eso también funciona a la inversa. Claramente, hay hoy en día una nueva dimensión en el ataque de los Eagles que no había con Wentz.
Jonathan Taylor, corredor, Colts. Otro que contribuyó a la paliza de Indianapolis sobre Las Vegas, que a la postre le costó el empleo al coordinador defensivo de los Raiders, Paul Guenther, fue el novato Taylor. Con 20 acarreos para 150 yardas y dos touchdowns, por mucho su mejor partido como profesional, Taylor ayudó a los Colts a rubricar la victoria, con sus dos anotaciones llegando en la segunda mitad.
Mitchell Trubisky, quarterback, Chicago Bears. En contra de uno de los dos quarterbacks con quienes está inexorablemente vinculado en virtud de los turnos en los que fueron seleccionados en el draft, Trubisky ofreció una sólida actuación que, sin embargo, puede ser insuficiente para garantizar su continuidad en Chicago. De cualquier manera, destacamos que completó 24 de 33 intentos de pase para 267 yardas con tres touchdowns sin intercepciones, ni balones sueltos. Los tres pases de anotación ocurrieron en el segundo periodo, dejando sin opciones --hablando de un modo práctico-- a Deshaun Watson y la miserable plantilla con la que se presentaron a jugar el día de hoy.
Russell Wilson, quarterback, Seattle Seahawks. Wilson se reencontró con el nivel de juego con que le vimos iniciar el 2020 y esas son solamente buenas noticias para Seattle. El quarterback completó 21 de 27 envíos para 206 yardas con cuatro pases de anotación y contra una intercepción, y al menos hoy, no se vio obligado a correr por su vida en todas las jugadas, ante los Jets. Claramente, ya no es el favorito para llevarse el premio al Jugador Más Valioso, pero todavía creo que hay tiempo para meterse en la conversación.
Los ofensivos de Green Bay y Kansas City destacaron junto a otros elementos en la primera semana de Playoffs.