Los Dallas Cowboys quedaron eliminados de manera oficial tras caer ante los New York Giants, que mantuvieron vivas sus esperanzas de ir a la Postemporada, al menos, por unas horas.
Los Cowboys, que llegaron a la Semana 17 con seis victorias y con el beneficio de pelear por el pase a Postemporada como campeón de la mediocre NFC Este, dejaron ir su última oportunidad de salvar la temporada 2020 tras caer 23-19 ante los Giants en un partido que fue un microcosmos de lo que fue una de las campañas más decepcionantes en la historia de la franquicia, que quedó fuera de Playoffs por segundo año consecutivo.
Por su lado, los Giants esperan el resultado del juego del domingo por la noche entre Washington y los Philadelphia Eagles, oues de perder el equipo de la capital, New York ganaría su pase a Playoffs como campeón de la NFC Este.
Los Cowboys se fueron debajo de manera amplia en el marcador con una defensiva que no sólo ante los Giants sino durante toda la campaña, pareció jugar sin energía y sin talento en sus tres áreas.
A su vez, la ofensiva fue inconsistente con una línea frintal de muy bajo nivel, un Andy Dalton fuera de ritmo y con un Ezekiel Elliott que ganaba yardas más por ganas que por tener huecos qué explotar en la línea de scrimmage.
Peor aún, el staff de entrenadores del coach Mike McCarthy, que decepcionó por completo con su controlversi al toma de decisiones, no dejó de hacerlo en el último juego del calendario regular.
McCarthy decidió no ir por la conversión de dos puntos después del único touchdown de Dallas, con 8:39 minutos por jugar en el tercer cuarto y con los Cowboys abajo por 20-15, con el argumento de que aún quedaba demasiado tiempo de juego.
“El tiempo es parte de la ecuación aquí. Hay otras variables que debes observar. Todas esas fueron discutidas. Por eso tomamos la decisión y creo que fue una decisión limpia”, indicó McCarthy.
El coach tampoco pidió la revisión de una recepción de Dante Pettis en tercera oportunidad con 7:07 minutos por jugar en el último cuarto en la yarda 32 de Dallas, una jugada antes del gol de campo con el que los Giants aseguraron el triunfo.
La repetición mostró de manera clara que el receptor de New York no tuvo posesión del balón. De revisarse la acción y determinado el pase incompleto, el balón hubiera quedado en la yarda 42 de Dallas con cuarta oportunidad y 16 para los Giants, distancia desde donde hubiera sido mucho más complicado el gol de campo.
“Pensamos que era una jugada demasiado cerrada”, explicó McCarthy después del partido. “Pensamos que era una situación que podía ir para cualquier lado. En ese momento, los tres tiempos fuera eran muy valiosos”.
Los Cowboys tienen demasiadas decisiones qué tomar sobre el personal y varios huecos que llenar en el receso de temporada que ya comenzó para ellos, luego de que varios analistas consideraron que Dallas llegaría lejos en Playoffs.
“Nuestros muchachos batallaron todo el camino hasta el final. Estoy triste por ellos, porque, igual que todos nosotros, teníamos la confianza de que seríamos capaces de salir con una victoria hoy (ante Giants)”, lamentó el estratega.
Las evaluaciones finales, como reconoció McCarthy, deben comenzar por todos los entrenadores, quienes parecieron cometer los mismos errores de manera reiterada, en particular el coordinador defensivo Mike Nolan, quien nunca pareció tomar control de su área ni mostrar progreso, a pesar de que los Cowboys robaron 12 balones en los últimos cuatro partidos entre intercepciones y balones sueltos.
“Esas evaluaciones, incluida la mía, comenzarán la próxima semana. Tendré entrevistas de salida con cada jugador y con cada entrenador”, dijo McCarthy.
También de forma inmediata, inicia la discusión sobre la situación contractual del quarterback Dak Prescott, quien negociará un nuevo acuerdo por tercer año consecutivo.
“Hay que apreciar todo lo que Dak ha hecho y lo que significa para este equipo”, destacó el quarteback Andy Dalton, quien se convertirá en agente libre. “(Dak) significa muchísimo para este equipo”.