GREEN BAY, Wis. -- Aaron Rodgers admitió que consideró el retiro, detalló su enfrentamiento en el receso de temporada con los Green Bay Packers y dijo que aún no está sobre si algo cambiará si es que algo cambia.
Rodgers está de regreso para su temporada 17 y aunque dio mucho material en su conferencia de prensa de 32 minutos tras la primera práctica del campamento de entrenamiento, el punto importante es el siguiente:
“Sólo quiero estar involucrado en la conversación que afecta mi habilidad para hacer mi trabajo”, destacó Rodgers.
Cuando se le preguntó si le han asegurado si eso sucederá, respondió, “No Estoy seguro”.
Rodgers habló ampliamente sobre su decepción por jugadores veteranos que los Packers han cortado o no recontratado en varios momentos de su carrera. De hecho, mencionó a casi una docena de jugadores, desde Charles Woodson hasta Julius Pepers a Randall Cobb, quien, de hecho, volverá a los Packers en cuanto se cierre un cambio con los Houston Texans.
“Quería ayudar a la organización, quizá aprender de algunos errores del pasado y sobre cómo algunos de los veteranos que van de salida fueron tratados y sólo el hecho de que no retuvimos a varios jugadores que sentía eran claves en nuestros cimientos, para nuestro vestidor. Jugadores con mucho carácter”, dijo Rodgers.
En quizá una de las respuestas más detallas que ha dado en su carrera, Rodgers tomó preguntas de los reporteros sobre la línea de tiempo de su receso de temporada en los primeros 5:41 minutos.
Dijo que en febrero, cuando se reunió con los Packers, “expresé mi deseo de estar más involucrado en las conversaciones”. También ofreció ayuda para ayudar a que agentes libres firmaran con Green Bay.
“El hecho de no haber sido usado en esas discusiones es algo que quería cambiar en el futuro y siento que, con base en mis años (de experiencia), la forma en la que puedo jugar, eso debería ser una parte natural de la conversación. Nada realmente cambió en ese frente desde ese momento”, añadió.
Rodgers dijo que desde ese punto, las conversaciones con el equipo se convirtieron en un compromiso con él no sólo para la temporada 2021 sino para el futuro.
“A eso realmente no se le dio algún plazo, así que, en mi opinión, tenía que encargarme de la situación, no necesariamente ser un quarterback y ya, especialmente después de una temporada en la que gané el premio como Jugador Más Valioso (MVP), lo cual, creo que ustedes entienden”, señaló.
Sobre marzo, Rodgers indicó que la conversación con el equipo cambió.
“Sentí que si no puedes comprometerte conmigo después de 2021 y no soy parte de su proceso de reclutamiento en la agencia libre, si no soy parte del futuro, entonces, en lugar de dejarme ser un simple quarterback, si quieres hacer un cambio y seguir adelante, adelante, házlo”, dijo Rodgers.
En abril, luego de que Adam Schefter de ESPN dio la noticia de que Rodgers había dicho a personas en la franquicia que no quería regresar a los Packers, fue cuando comenzaron las negociaciones contractuales.
“Básicamente lo que pasó es que (los Packers) dijeron, ‘Bueno, te daremos algo de dinero ahora. Veamos si podemos darte dinero’”, relató Rodgers. “Desde el inicio dije que no era sobre dinero. Obviamente, no me presenté al programa o minicampamento de receso de temporada. Para mí, era por algo más grande. Se trataba de intentar ser una recurso para la franquicia a la que quiero y amo tanto.
“La historia de fondo es que hay una parte de mí que no creyó que hubiera conversaciones sobre una extensión de contrato con base en mi impacto en el tope salarial esta y la próxima temporada. Parecía natural que con base en la forma en que jugué, al menos tener una conversación sobre eso. No hubo alguna hasta mayo”, agregó.
Sobre mayo y junio, cuando Rodgers se ausentó de todo el programa de trabajo de receso de temporada, dijo, “Nada realmente cambió durante el verano”.
“Se dieron algunos pases en la última semana, más o menos, pero realmente estaba trabajando en mí mismo y mi propio estado mental en el verano y en varios puntos decidí si quería incluso seguir jugando, pero la flama allí sigue y quería estar en el equipo. Logramos resolver algunas cosas los últimos días”, destacó.
Rodgers, quien participó en toda la práctica del miércoles y tomó todas las repeticiones con el primer equipo, mientras que Jordan Love trabajó con los suplentes, lanzó un par de pases con el calibre de un quarterback MVP, uno de 20 yardas en una ruta de corte a la esquina a Equanimeous St. Brown y uno de touchdown a Davante Adams.
“Hay aún un gran hueco de competitividad en mi cuerpo que necesito llenar y al tiempo que regreso a mis entrenamientos físicos, me di cuenta que aún puedo jugar y que quiero seguir jugando y mientras sienta que puedo dar el 100 por ciento al equipo, debo jugar”, recalcó.
Aunque es claro que Rodgers se sintió desplazado por la franquicia que lo reclutó en 2005 como el futuro remplazo de Brett Favre en 2008, también dijo que no quería ser considerado como la víctima en su disputa con los Packers.
“No soy la víctima aquí. He ganado mucho dinero aquí y he sido realmente afortunado de jugar por mucho tiempo y hacerlo aquí. Al mismo tiempo, aún soy competitivo y aún siento que puedo jugar. Lo probé el año pasado”, aseguró Rodgers.
Rodgers aún no sabe lo que depara su futuro más allá de la actual temporada y dijo que aunque no ha descartado regresar a los Packers, tampoco le han dicho si él puede decidir dónde podría jugar en 2022 si lo elige.
Aunque es clara su molestia con la directiva, señaló que nunca ha pedido que el gerente general Brian Gutenkust sea despedido y calificó su relación con él como “profesional”.
Rodgers habló con detalles sobre dónde considera que las cosas se pusieran feas, lo cual hizo que valiera la pena preguntarle su realmente quiere volver a Green Bay.
“Sí, sí. Amo a mis compañeros, amo la ciudad, a mis coaches. Es muy divertido volver”, aseguró.