El quarterback de los Flames es uno de dos prospectos en la posición con buenas posibilidades de ser tomado en la primera ronda, incluso, tan alto como el Top-10 en el orden
LYNCHBURG -- El quarterback de Liberty, Malik Willis, impresionó a una congregación récord para la escuela de unos 60 coaches, visores y ejecutivos de la NFL, representando a los 32 equipos, con la potencia en el brazo y atleticismo que lo tienen proyectado como recluta de primera ronda.
Willis lució particularmente impresionante este martes con un pase improvisado de 65 yardas en el aire, sin tiempo para que el pasador de 22 años de edad fijara su base antes de lanzar la bomba.
Pero, lo que pareció impresionar más a Willis, quien salió al evento sin metas ni expectativas de ningún tipo, ocurrió en la noche previa, mientras cenaba con el head coach de los Pittsburgh Steelers, Mike Tomlin.
"Me quedé como, '¿Mike Tomlin comiendo alitas de pollo?'", dijo un asombrado Willis al término de una sesión que incluyó un guion con 70 pases. "Es lo que quieres. Digo, es un tipo normal".
Tomlin, quien posee el turno N° 20 global del draft que arranca el próximo 28 de abril, fue uno de dos head coaches presentes. El otro, fue Matt Rhule de los Carolina Panthers, cuyo equipo elige sexto global.
Rhule y el coordinador ofensivo Ben McAdoo pasaron la mayor parte del tiempo en que Willis ejecutó sus 70 jugadas, parados a unas 10 o 15 yardas del quarterback. Scott Fitterer de Carolina, uno de cuatro gerentes generales/ejecutivos presentes, no estaba demasiado lejos.
Los otros gerentes generales/ejecutivos, fueron Terry Fontenot de los Atlanta Falcons, Kevin Colbert de los Pittsburgh Steelers, y Marty Hurney de los Washington Commanders.
Carolina y Atlanta se quedaron cortos la semana pasada en su intento de adquirir en canje al quarterback de los Houston Texans, Deshaun Watson, quien al final eligió a los Cleveland Browns.
Así que, ambos equipos se mantienen en el mercado en busca de pasadores, con todo y que Atlanta firmó a Marcus Mariota después de enviar en canje a Matt Ryan a los Indianapolis Colts, y los Panthers todavía con Sam Darnold bajo contrato.
Washington también se mantiene en el mercado a pesar de adquirir vía traspaso a Carson Wentz, y lo mismo sucede con Pittsburgh pese a que fichó a Mitch Trubisky en la agencia libre.
Ninguno de ellos luce como solución a largo plazo. Willis y Kenny Pickett de Pittsburgh, quien realizó su pro day el lunes, podrían serlo. Parecen los quarterbacks con mejores probabilidades para ser tomados en primera ronda, quizás en el Top-10, de lo que es percibido como un draft con una camada débil de quarterbacks.
No hubo nada de débil en el pro day de Willis, sin embargo, con todo y que atrajo menos de los 120 observadores que originalmente se esperaban después de que la agencia libre reconfigurara el mercado de quarterbacks.
El balón salió con explosividad de su mano, como deseaban ver de primera mano varios coaches. Ninguna jugada fue más impresionante que la conexión de 65 yardas en la que Willis tomó el ovoide desde el centro, retrocedió, roló a su derecha, cambió de dirección a la izquierda, y luego encontró a su receptor en movimiento a la altura de la línea de gol.
El lanzamiento generó sonrisas de coaches como McAdoo. También, se ganó los aplausos de compañeros de equipo y familiares.
Willis respondió corriendo campo abajo para felicitar a su receptor antes de finalizar la sesión con algunos pases de zona roja.
"¿Qué pensaron de eso?", preguntó después el head coach de Liberty, Hugh Freeze.
La improvisación y el pase apoyaron todo lo que Freeze ha estado diciendo a equipos de la NFL por meses: que Willis posee el talento para ser un estelar en las filas profesionales, incluso si no siempre enfrentó competencia del más alto nivel jugando para Liberty.
Cuando tres equipos le preguntaron más temprano en la jornada qué debía mejorar Willis, Freeze citó "retrocesos truncados" que a menudo rompen con la sincronía de una jugada.
Pero, en términos de habilidad natural y atleticismo para improvisar como hizo en el pase de 65 yardas, Freeze señaló que no hay equipo en la NFL que no podría usar a Willis con base en la protección al pasador que vio durante los playoffs.
Freeze notó que Willis hizo jugadas en Liberty "donde los tipos a su alrededor no son manzanas con manzanas'' respecto al oponente, en términos de talento. Dijo que Willis no tendrá problemas aprendiendo un libro de jugadas de NFL, o con su coeficiente intelectual para el juego.
El pro day también puso en evidencia lo que observa Freeze todos los días en la práctica: que Willis sabe cómo divertirse mientras es productivo.
"Siempre intento salir allá y divertirme", dijo Willis. "Es un juego de niños, y tratamos de que nos paguen por hacerlo. Eso es grandioso en sí mismo".
Willis no participó en ningún otro ejercicio, aparte de lanzar. Cuando se le preguntó por qué no corrió las 40 yardas, sonrió mientras respondía, "Soy veloz".
"Si hubiera corrido las 40, hubiera sido agradable, pero no hubo motivo", expresó Willis, de quien se reporta corrió las 40 yardas en 4.37 segundos como sophomore en Auburn. "Solamente habría demostrado que soy veloz. Y si ustedes ya piensan que soy veloz, entonces realmente no hice nada.
"Pero, soy veloz".
Willis también es ágil de mente. Lo demostró cuando se le preguntó qué se siente que tantas personas a nivel nacional hablen de él en televisión y redes sociales a lo largo de los meses recientes.
"Ellos se aburren", contestó. "Juro que se aburren. Los reflectores nacionales, es un poco extraño. Es como, 'Ey, a ustedes les importa más que a algunas personas que sé que les importa'. Me quedo como, 'Vaya, actúan como si fuéramos primos'".