"Es todo lo que se podría desear, especialmente para un quarterback en Cincinnati", reconoció el presidente de los Bengals, Mike Brown
CINCINNATI -- El presidente de los Cincinnati Bengals, Mike Brown, sabe que se viene una masiva negociación contractual, y un masivo cheque potencial, para el quarterback Joe Burrow.
Durante el almuerzo anual del equipo con los medios, celebrado este lunes, Brown dijo no saber cómo se resolverá una vez que Burrow sea elegible para una extensión de contrato. Pero, Brown está confiado en lo que siente respecto al quarterback franquicia del equipo.
"Les puedo decir que no puedo estar más contento con Joe Burrow", dijo Brown. "Es todo lo que se podría desear, especialmente para un quarterback en Cincinnati. Todo nuestro enfoque estará en retenerlo aquí".
Burrow, el primer recluta global en el Draft 2020, se sobrepuso a una lesión seria de rodilla sufrida durante su campaña de novato, para liderar a los Bengals a su primera aparición de Super Bowl en 33 años.
Completó el 70 por ciento de sus pases para 4,611 yardas, 34 touchdowns y 14 intercepciones.
Burrow está actualmente entrando al tercer año de su contrato de novato, uno que promedia 9.9 millones de dólares anuales, de acuerdo al Roster Management System. Siete quarterbacks actualmente cobran más de 40 millones de dólares al año. Esos jugadores promediaron, también, 141.9 millones de dólares en dinero garantizado para sus respectivos acuerdos.
"Es loco el número que están consiguiendo estos tipos, y creo que es bien merecido", dijo Burrow en junio, cuando se le preguntó a cerca de los recientes convenios de Aaron Rodgers con los Green Bay Packers, y Deshaun Watson con los Cleveland Browns. "Todos esos tipos están al tope de su juego. Están siendo pagados acorde. Pero, en realidad, no he pensado mucho en ello ahora".
El equipo tendrá la posibilidad de extender el acuerdo de novato de Burrow por un año, gracias a su status como recluta de primera ronda. No obstante, Burrow y el resto de la camada de reclutas del Draft 2020 de la NFL son elegibles para recibir extensiones de contrato al término de la campaña que viene.
"Es un rompecabezas", dijo Brown. "No todo se ajusta a la perfección. Vamos a tener algunos positivos. Vamos a tener algunos tipos firmados que son críticos para el equipo. Y vamos a perder a algunos tipos".
El safety de los Bengals, Jessie Bates III, es uno de los que están en riesgo de salir. Por segundo año consecutivo, Bates y el club fracasaron en su intento de acordar una extensión a largo plazo. A Bates se le colocó la etiqueta de jugador franquicia en marzo, pero todavía no ha firmado la oferta calificada, y su disponibilidad para el campamento de entrenamiento se mantiene en la incertidumbre, reveló el head coach Zac Taylor.
El de Burrow no será el único contrato clave que estará a discusión antes del 2023. El receptor abierto Tee Higgins también será elegible para una extensión. El receptor abierto Ja'Marr Chase, Novato Ofensivo del Año reinante en la NFL, puede comenzar sus discusiones contractuales en el 2024.
Brown y la directiva de Cincinnati saben que necesitarán tomar en cuenta a Higgins, Chase y otros actualmente jugando bajo contratos muy amigables para el club.
Pero, no existe debate respecto al objetivo primario a largo plazo para el club, en términos de negocios.
"Ahora, nuestro tema más importante, más obvio, será con nuestro quarterback", dijo Brown. "No está precisamente listo, o maduro, pero va por ese camino. Vemos que se aproxima el tren".