Bajo la tutela de Mike Zimmer y Paul Guenther, Dallas ha implementado paquetes especiales para explotar al máximo la capacidad del estelar defensivo
OXNARD -- Son poco más de las 8 a.m., y la junta de equipo de los Dallas Cowboys ha concluido.
Mientras que una buena porción de la plantilla de 90 hombres se dirige a las reuniones de equipos especiales, el linebacker Micah Parsons se encamina a la sala de juntas de la defensiva para desayunar. Cerca, está el nuevo coordinador defensivo, Mike Zimmer, y el coordinador de juego terrestre, Paul Guenther. Por la mayor parte de esta semana, el esquinero Trevon Diggs se ha unido al grupo.
Por los siguientes 20 minutos, Parsons se convierte en el estudiante y Zimmer en el profesor.
"No estoy solo aprendiendo la defensiva. Me tienen comprendiendo a la defensiva como un todo. Planes de protección; comprender por qué el deslizamiento va a estar por debajo de aquí; dónde estarán mis oportunidades; por qué identifican al [apoyador medio, también conocido como Mike]; por qué bajamos al safety y por qué cambia al Mike; y por qué podrían deslizar hacia ese lado en lugar de nuestro lado; y por qué la carga viene de este lado", explicó Parsons. "Yo solo diría que están incrementando mi inteligencia de fútbol americano. No se trata solo del sistema. Pienso que un día, me están poniendo en posición para dirigir o algo, porque todos los días son diferentes".
Parsons ha sido una fuerza desde que los Cowboys lo seleccionaran en la primera ronda del draft del 2021. En tres campañas, ha sido All-Pro de primero o segundo equipo. Ha sido invitado al Pro Bowl en cada temporada. Ha finalizado entre los mejores tres en la votación por Jugador Defensivo del Año cada temporada. Solamente Parsons y Reggie White han registrado al menos 12 capturas en cada una de sus primeras tres temporadas de NFL.
Pero, Zimmer busca darle más responsabilidades. Como novato, Parsons genuinamente dividió tiempo entre linebacker tradicional y cazador de quarterbacks. En el 2022 y 2023, estuvo alineando predominantemente por la orilla.
Este año, se espera que Parsons se mueva más.
"Es brillante, N° 1", describió Zimmer de Parsons. "Comprende el fútbol americano, N° 2".
Parsons dijo que Zimmer ha integrado paquetes "Lion" (en referencia al alma mater de Parson, Penn State Nittany Lions) en las defensivas base, con cinco y seis backs defensivos.
Lo más cerca que Zimmer ha tenido a alguien con las herramientas de Parsons fue Anthony Barr, quien fue su recluta de primera vuelta en el 2014, cuando fungía como head coach de los Minnesota Vikings.
"No sé si no podría jugar todas las posiciones", comentó Zimmer. "Probablemente podría jugar como safety libre si quisiera. Ahora, no lo quiero allá atrás cubriendo pases muy a menudo".
Hasta ahora en el campamento de entrenamiento, Parsons ha estado pasando entre colocar la mano en el suelo y alineando como linebacker tradicional. Luce más como en su campaña de novato, cuando pasó más tiempo como linebacker que ala defensiva.
En una práctica, pasó de tratar de vencer al tackle izquierdo novato Tyler Guyton por la orilla a retroceder en cobertura en la siguiente jugada, con la línea ofensiva viéndose sorprendida y permitiendo presión de un jugador en la carga por otro lado.
"Voy a hacer un poco de ambos, como he hecho en el pasado", reveló Parsons. "Pienso que el personal y los paquetes son buenos. Y, ahora que tenemos un mayor entendimiento uno del otro, pienso que será un gran año".
Cuando Zimmer fue contratado, mucho se dijo de sus modos a la vieja usanza y cómo se acomodaría con Parsons, tratándose de un coach a menudo malhumorado que regresa después de una ausencia de dos años a la NFL. En junio, Parsons dijo que no había cruzado "ni 20 palabras", sobre todo porque Parsons no asistió a la porción voluntaria del programa de temporada baja. Sí habló, en cambio, frecuentemente con Guenther, quien se ha convertido en una especie de mentor para Parsons. Guenther asistió al campamento de fútbol americano de Parsons en Harrisburg, Pennsylvania.
Zimmer se ha topado con que Parsons es extremadamente fácil de dirigir, lo mismo que otros grandes jugadores que ha tenido en el pasado, como Deion Sanders, Darren Woodson, Danielle Hunter y Eric Kendricks, entre otros.
"Hablé con él [recientemente] ... acerca de algo donde pienso que puede ser más efectivo sí hacía tal cosa, y estuvo de acuerdo", notó Zimmer. "Pero, los grandes jugadores desean ser dirigidos. Los jugadores quieren mejorar. Mi filosofía siempre ha sido: 'Si saben que los puedes ayudar y sabes lo que haces, ellos van a escuchar'. Su carrera no es muy larga, así que entre más puedan mejorar y mejorar, obviamente mejor para el equipo y mejor para sus carreras".
De las historias que escuchó Parsons antes de llegar a conocer a Zimmer, dijo que el coach ha cambiado por completo, pero sí admitió que no ha visto cómo es Zimmer durante los partidos cuando "la atención y las emociones son mucho más altas".
Dijo que sus conversaciones han sido transparentes.
"Yo diría que Zim es definitivamente uno de los tipos más conocedores que haya conocido", reconoció Parsons. "Lo mismo va para Paul. Zim no dice mucho, pero dice el por qué. No es un coach que solo te dice que hagas algo. Es alguien que te va a decir por qué te lo dice y por qué es exitoso, Siempre hay propósito detrás de lo que dice, así que cuando habla, realmente escuchas y gravitas hacia ello".
Parsons también gravitó hacia su primer coordinador en la NFL, Dan Quinn. Ambos formaron un vínculo rápidamente, y Parsons sigue en contacto con de Quinn, ahora head coach de los Washington Commanders.
"Es mi tío mayor, alguien a quien amo profundamente", admitió Parsons. "Pero, al final del día, tengo un trabajo por hacer, y es patearle el trasero dos veces al año. Podemos abrazarnos después de eso".
Zimmer no será el tío mayor, pero Parsons sabe que el coach desea lo mejor para él, especialmente con los paquetes 'Lion'.
"Es un honor. Muestra mucho que (1) cree en mí, (2) comprende las capacidades que tengo, y entonces (3) pienso que se reduce a que yo lo quiera y esté ansioso por aprender, ansioso por aprender los conceptos, entender que se necesitará más de mí, y entonces (4) se requiere de ambos", manifestó Parsons. "Su empuje es verme ser grande. Mi impulso es querer ser grande. Y cuando pones, pienso, dos grandes mentes juntas, cosas grandes pueden suceder".