KANSAS CITY -- Andy Reid está como la mayoría de las personas en estos días. El entrenador de los Kansas City Chiefs se enclaustró en su sótano, donde improvisó una oficina que consiste en su computadora, un iPad y una mesa vieja.
La diferencia: está intentando construir un equipo ganador que pueda defender el título de Super Bowl.
Hilar cetros consecutivos es suficientemente complicado en circunstancias normales. Sólo siete franquicias han ganado campeonatos seguidos.
Pero resulta aún más difícil cuando el periodo de vacaciones está inmerso en el caos debido a la crisis por la pandemia de coronavirus. Se ha visto afectada la agencia libre, el draft de la NFL y los entrenamientos de los equipos que debían empezar este mes, pero que están postergados.
“Nos mantendremos al tanto como se pueda con información de la liga”, dijo Reid en una conferencia telefónica el jueves. “Lo estamos enfrentando como si tuviéramos una temporada y creo que tiene su lado positivo y negativo. Puede ser positivo darle algo al país en un momento en el que lo necesita. Al mismo tiempo, estamos muy conscientes de lo que está ocurriendo”.
Reid tiene el mismo sentimiento con respecto al draft que se realizará sin aficionados este mes, en medio de un confinamiento nacional. Podría ser una agradable distracción en una situación atípica, pero también ocurre cuando muchas personas están enfrentando problemas de salud y una precaria situación económica.
Todo ello es más importante que el fútbol americano.
Mientras tanto, Reid y el gerente general de los Chiefs, Brett Veach, siguen trabajando en la plantilla.
Con muy poco espacio respecto del tope salarial, los Chiefs han tenido una discreta agencia libre. Firmaron al veterano integrante de la línea ofensiva Mike Remmers para darles más variantes, trajeron al esquinero Antonio Hamilton para competir por un puesto de titular, y firmaron al quarterback de la liga XFL, Jordan Ta’amu, para agregar otra opción.
Eso, además de otorgarle la etiqueta de franquicia al tackle defensivo elegido al Pro Bowl, Chris Jones, es lo único que han hecho los Chiefs.
El límite salarial es la razón principal, pero también el COVID-19 ha sido un factor.
Con la incertidumbre de cuándo les permitirán volver al centro de prácticas y la duda de si habrá siquiera entrenamientos durante el verano, se incrementa el valor de los jugadores que ya conocen el sistema.
Los Chiefs esperan llenar alguno de los huecos a través del draft, a pesar de que se realizará sin poder traer a los jugadores para un entrenamiento y sosteniendo las entrevistas sólo por medios digitales.