A pesar de la humillante derrota ante Denver, Dallas sigue muy bien posicionado para pelear la cima de la Conferencia Nacional
FRISCO -- Dak Prescott e Ezekiel Elliott no repetirán la notable racha de sus temporadas de novatos con los Dallas Cowboys de hace cinco años.
El quarterback y el running back lograron cubrir más de la mitad del camino al encadenar seis victorias, tras perder el partido inaugural, antes de sucumbir por 30-16 ante los Denver Broncos el domingo.
El liderato de la Conferencia Nacional de la NFL, que Dallas conquistó en 2016 luego de 11 victorias consecutivas con Prescott y Elliott tras el primer partido, sigue en juego. Los Cowboys sólo tienen que olvidar un día humillante en un partido en el que se presentaron como favoritos y se encontraron perdiendo 30-0 durante un momento.
“Conozco la personalidad de los jugadores, conozco la personalidad del personal, responderán de la forma que esperamos que lo hagan”, señaló el dueño y gerente general del equipo, Jerry Jones. “Hemos visto a nuestro equipo jugar mucho mejor que eso”.
El líder de la Conferencia Nacional, los Arizona Cardinals (7-1), son el único equipo con menos derrotas que los Cowboys (6-2), después de que los Green Bay Packers y Los Angeles Rams perdieron el domingo para quedar en 7-2. Los campeones vigentes del Super Bowl, Tampa Bay Buccaneers (6-2), que vencieron a Dallas en el primer encuentro de la campaña, son el otro equipo en ese grupo ahora mismo.
¿Qué funciona?
Un partido no cambia lo que el coordinador ofensivo Kellen Moore ha mostrado en la que probablemente sea la ofensiva más diversa de la liga. En un segundo plano por el déficit de 30-0 contra Denver, Malik Turner atrapó sus dos primeros pases de touchdown de su carrera con Dallas.
Los Cowboys tienen seis receptores y alas cerradas con varios pases de anotación, y no hay duda de que Amari Cooper y CeeDee Lamb forman una de las mejores duplas de recepción en la NFL.
¿Qué no funciona?
Parece que Elliott estará lidiando con una dolencia en la rodilla derecha toda la temporada.
La peor recaída se produjo contra Denver. Elliott salió cojeando del campo tras uno de sus acarreos, regresó para un avance de 21 yardas en un pase pantalla y luego volvió a abandonar el encuentro una jugada después. El estelar jugó hasta el final del partido, cuando éste ya se le había ido de las manos a Dallas.