BARCELONA -- Marco Verratti quiere marcharse del PSG y así se lo ha comunicado ya al club, a través del nuevo director deportivo Antero Henrique, trasladándole una petición formal para que el club francés apruebe este verano su traspaso.
La información, publicada este domingo por el diario L’Equipe, coloca en el primer plano al Barcelona, que tiene al mediocampista italiano como uno de sus grandes objetivos en el mercado aunque no ha movido pieza a la espera de que fuera el propio jugador el que iniciase la operación.
A partir de esta solicitud ‘formal’ y a la espera de la reacción del PSG, el club azulgrana empezaría a posicionarse para iniciar una negociación que se vislumbra muy complicada, entendiéndose que Nasser Al-Khelaifi, presidente de la entidad parisina, es totalmente contrario a permitir la salida de uno de los futbolistas vitales en su proyecto.
Aunque en los últimos meses a Verratti se le ha colocado en la órbita de clubes como Bayern, Juventus o Manchester City no es un secreto que el Barça está situado en el primer plano.
Al centrocampista italiano, de 24 años y por quien el PSG pagó 12 millones de euros al Pescara en el verano de 2012, se le sigue muy especialmente desde el Camp Nou como el heredero ideal de Iniesta en la idea que tiene el club azulgrana de reforzar el centro del campo con un futbolista de toque y que sí pueda llenar ese vacío que nunca fue capaz Arda Turan.
Una fuente cercana a la directiva del Barcelona reconoció que el nombre de Verratti “es muy valorado” por la secretaria técnica pero avanzó que el club no se ha dirigido al club francés, lo que confirma la estrategia que pretende llevar a cabo el Barça: esperar a que el PSG sepa oficialmente por medio de su propio jugador que quiere abandonar el club.
CAUTELA
Verratti, a quien L’Equipe valora en 80 millones de euros, se convertiría en el traspaso récord en la historia del PSG y, probablemente, alcanzaría igualmente tal consideración en caso de aterrizar en el Camp Nou, superando los más de 90 millones que entre todos los conceptos se desembolsaron en la incorporación de Neymar.
Apenas conocerse que la directiva de Josep Maria Bartomeu desea aumentar el presupuesto destinado a los fichajes este verano, el nombre del menudo y soberbio centrocampista italiano se ha colocado en el escenario y diversas reacciones a la publicación del diario L’Equipe especulan con que el club azulgrana estaría en disposición de presentar una oferta de 100 millones de euros.
Dicho rumor, sin embargo, fue rechazado de pleno desde el entorno del Camp Nou, donde la misma fuente sentenció que no ha existido ningún tipo de contacto formal entre los dos clubes.
El Barça, de hecho, no quiere entrar en ningún tipo de enfrentamiento con el PSG. Consciente del poder financiero del club francés, que en el verano de 2016 llegó a poner en un cheque en blanco al padre de Neymar para lograr su fichaje, en Barcelona la cautela es máxima, evitándose dar la sensación de atacar el fichaje de Verratti a espaldas de la directiva parisina.
Al-Khelaifi, que permitió el regreso de David Luiz al Chelsea y no pudo convencer a Ibrahimovic para renovar su contrato, ha evitado en los últimos años la marcha de jugadores como Marquinhos o Thiago Silva (sondeados ambos por el Barça), Rabiot (que llegó a tener un acuerdo con la Roma) o Motta, a quien Simeone convenció para fichar por el Atlético de Madrid.
Todos ellos se quedaron en el PSG ampliando y mejorando sus contratos en una señal de lo que puede suceder ahora con Verratti, quien estando atado por el club hasta junio de 2021 podría ser convencido por el presidente con un aumento de salario que le convirtiera en el mejor pagado de la plantilla.