MÉXICO -- Los Green Bay Packers gozan de una gran época bajo el mandato de Mike McCarthy, quien ha logrado meterlos a los playoffs en seis ocasiones de ocho temporadas que lleva al mando del equipo y solo en una ocasión ha terminado la temporada regular con marca negativa (2008), pero desde que obtuvieron el Super Bowl XLV solo han conseguido una victoria en la postemporada y su defensiva se ha convertido en una de las más endebles de la liga, situación que tiene en la mira al coordinador defensivo Dom Capers, quien ha sido constantemente defendido por el entrenador en jefe y el gerente general Ted Thompson.
Es cierto que las lesiones que han sufrido hombres importantes en el esquema han sido gran parte del 'declive' en las estadísticas pero tal pareciera que los Packers no han entendido del todo la lección. Sus jugadores titulares son de primera línea y algunos se encuentran en la élite de la NFL, pero la diferencia entre ellos y sus reservas es abismal.
La temporada baja para Green Bay ha dibujado algunas sonrisas en sus aficionados con la incorporación de jugadores como el novato Ha Ha Clinton-Dix y el veterano Julius Peppers, lo que debe suponer una mejoría inmediata en posiciones de las cuales los Packers adolecían, pero del otro lado del ovoide se han levantado varias interrogantes como las que a continuación describiremos.
¿QUÉ PODEMOS ESPERAR DE LA OFENSIVA?
Aaron Rodgers está convertido en uno de los mejores mariscales de campo de la liga --si no es que el mejor-- y es capaz de montar todo tipo de espectáculos cada fin de semana, pero el constante cambio de coordinadores ofensivos, no tan seguido como con los Bears, y la pérdida de hombres importantes en el juego aéreo pronto podrían pasar factura.
El año pasado Green Bay contó con un ataque terrestre capaz de mantener a las defensivas oponentes preocupadas por Eddie Lacy y compañía, y este año la fórmula podría ser la misma ¿pero qué pasaría si el egresado de Alabama se lesiona? Los Packers ya no podrán contar más con Jhonathan Franklin --quien optó por el retiro tras una lesión en el cuello-- así que sus esperanzas recaerían en James Starks, DuJuan Harris y un puñado de jugadores que no han sido capaces de demostrar su calidad.
En el juego aéreo la historia no es muy diferente. Todo indica que el ala cerrada Jermichael Finley no estará más con el equipo --podría repetirse la historia de Jhonathan Franklin-- y James Jones decidió cambiar de aires al emigrar a Oakland. A pesar de ello Rodgers sigue contando con dos grandes receptores en las figuras de Jordy Nelson, recientemente renovado, y Randall Cobb pero ambos son propensos a las lesiones.
A la hora que McCarthy y el coordinador ofensivo Tom Clements decidan voltear a buscar opciones se darán cuenta que estas son muy limitadas ya que han sido víctimas de esta malaria que parece atravesar Green Bay al enterarse que los novatos Jared Abbrederis y el ala cerrada Colt Lyerla están prácticamente fuera por lo que resta del año.
Habiendo dicho todo esto, los Packers deben encomendarse a que sus jugadores estelares se mantengan sanos todo el año, ya que de lograrlo son capaces de posicionarse como una de las mejores ofensivas de toda la liga, gracias a lo que es capaz de hacer Aaron Rodgers con su brazo y con sus piernas.
¿QUÉ PODEMOS ESPERAR DE LA DEFENSIVA?
Si hay un hombre que está bajo una enorme presión en este equipo es el coordinador defensivo Dom Capers. Es cierto que ha demostrado su valía en la liga y por eso los Packers le han reiterado su voto de confianza a alguien que con las armas que posee para esta temporada es capaz de regresar a esta unidad a media tabla. Sería difícil decir que tienen la calidad como para estar en los primeros planos.
Al igual que les ha sucedido con la ofensiva, a los Packers se les ha complicado el tema con las lesiones y como ejemplo basta recordar lo sucedido con el esquinero Casey Hayward, quien después de ser candidato al premio como Novato Defensivo del Año en el 2012 se perdió gran parte de la temporada anterior por lesiones.
La defensiva depende en gran medida por lo que puedan hacer sus profundos, quienes reciben con los brazos abiertos al novato proveniente de Alabama, Ha Ha Clinton-Dix, quien está llamado a generar impacto inmediato en un departamento que ha extrañado a Nick Collins, parte fundamental para obtener el Super Bowl XLV.
El cuerpo de apoyadores y línea defensiva también debe mejorar sustancialmente con el veterano Julius Peppers y, si las lesiones lo permiten, con el apoyador Nick Perry, quien por fin buscará demostrar por qué los Packers invirtieron una selección de primera ronda en él.
Los dos primeros años de Dom Capers en Green Bay trajeron grandes satisfacciones pero el declive ha sido tal que en el 2011, un año después de su mejor registro, pasaron a ser la peor defensiva de la liga en puntos permitidos.
DESDE LA ENFERMERÍA
Gran parte de esta previa se ha dedicado al grave problema que han enfrentado los Packers con las lesiones en jugadores claves, pero un equipo que desea trascender en esta liga debe de ser capaz de tener el personal suficiente para que la ausencia de sus titulares no sea tan notoria.
Es cierto que la calidad de un jugador novato queda demostrada al momento de saltar al emparrillado pero el caso del ala cerrada Colt Lyerla, proveniente de Oregon, llama particularmente la atención.
Los Packers hicieron una apuesta con el problemático pero talentoso jugador, quien en un entrenamiento salió lesionado y se perdería lo que resta de la temporada al desgarrarse el ligamento cruzado. Lyerla estaba llamado a ser el sucesor de Jermichael Finley, toda vez que Green Bay se deshizo hace una temporada de Tom Crabtree; Andrew Quarless está llamado a ser el titular.
PRONÓSTICO PARA LA TEMPORADA 2014
Los Packers han sido amos y señores de la División Norte de la Conferencia Nacional desde el 2011 y a pesar de los esfuerzos de sus oponentes han encontrado la manera de subsistir, creo que inclusive algunas veces ellos se han cuestionado el cómo lo han hecho.
Tres complicadas visitas para abrir el calendario (ante los campeones Seahawks, Lions y Bears) darán un gran panorama de lo que podemos esperar de Green Bay para esta temporada. Es cierto, es muy temprano en el calendario, pero cuando llegue el momento de los procedimientos de desempate esos partidos como visitantes pueden ser claves, si no me creen, pregúntenle a Chicago.
El equipo de Mike McCarthy parece estar un paso por encima de sus rivales divisionales y el hecho de recibir a dos equipos con posibilidades de playoffs (New England Patriots y Atlanta Falcons) en un momento crucial de la temporada les puede dar el impulso final o sepultar sus aspiraciones.
Creo que con una marca de 11-5 los Packers ligarán su cuarto título divisional y a pesar de tener las armas para ser un aspirante al Super Bowl, aún siguen un paso por debajo de sus rivales en la División Oeste. La Final de la Conferencia Nacional no suena como algo descabellado, máxime que al menos recibirían un juego de playoffs en el Lambeau Field y han demostrado ser capaces de triunfar como visitantes en la postemporada.