Diego Schwartzman no tuvo su mejor año en la temporada 2022. El "Peque", que venía de tener un 2021 con varias semanas dentro del Top 10 del ranking mundial y con un título ganado (Buenos Aires), no pudo volver a repetir la performance.
Si bien el año del argentino comenzó con una victoria ante Stefanos Tsitsipas en la ATP Cup, en el Abierto de Australia se despidió tras caer sorpresivamente ante el local Christopher O'Connell, en ese entonces N°175 del planeta. Pasado el certamen oceánico, fue al ATP 250 de Córdoba en el cual perdió nuevamente ante una revelación en las semifinales: Alejandro Tabilo, 144° en ese momento.
Posteriormente a esas dos derrotas sorpresivas, Schwartzman se recuperó y logró ser finalista del ATP 250 de Buenos Aires y el ATP 500 de Río de Janeiro mostrando un gran nivel de tenis. En las finales perdió ante dos de los mejores jugadores del mundo, Casper Ruud y Carlos Alcaraz respectivamente.
En los torneos de Miami e Indian Wells, el Peque nuevamente no pudo mostrar su mejor juego y se fue en tercera y segunda ronda respectivamente, con John Isner y Thanasis Kokkinakis como verdugos. Luego, en abril, con el inicio de la gira de polvo de ladrillo pre-Roland Garros tuvo resultados más que valorables en Monte-Carlo (cuartos, con triunfos ante Karen Khachanov, Marton Fucsovics y Lorenzo Musetti) y Barcelona (semis, con victoria ante Musetti y Felix Auger-Aliassime).
Luego, en Roland Garos, pese a iniciar con un buen nivel, fue Novak Djokovic quien le mostró la puerta de salida. Sobre la gira sobre césped, Diego no pudo hacer pie y tuvo derrotas en primera ronda de Queen's, segunda de Eastbourne y de Wimbledon. En todos estos torneos, cayó ante jugadores que estaban por fuera del Top 100.
En sus últimos dos torneos sobre polvo de ladrillo de 2022, Bastad y Hamburgo, no pudo superar los cuartos de final en ninguno de los dos y solo tuvo una victoria: 7-5 y 6-3 ante el sueco Elías Ymer. Sobre el cemento, en Canadá y Estados Unidos, el Peque tuvo grandes partidos y momentos de muy buen tenis pero Albert Ramos-Vinolas en Montreal, Stefanos Tsitsipas en Cincinnati y Frances Tiafoe en el US Open.
Tras esos resultados, Schwartzman ingresó en una espiral de resultados negativos que generaron una racha de seis derrotas al hilo entre la Copa Davis y el Masters 1000 de París con partidos perdidos muy sorprendentes como contra Ymer en la serie frente a Suecia o Arthur Rinderknech en Tel Aviv.
Toda esta irregularidad en el año se tradujo en un descenso en el ranking mundial hasta el 25° lugar, saliendo del Top 20 por primera vez en tres años y medio. Si bien este resultado es negativo, el lado positivo es que Diego sigue estando entre los mejores del mundo y compitiendo de igual a igual ante los tenistas de élite.