La bielorrusa Victoria Azarenka (24ª del mundo) es la única campeona presente en el cuadro del Abierto de Australia femenino y busca impedir que haya una nueva ganadora en el certamen. En el último turno de la jornada, Vika se impuso con parciales de 4-6, 6-1 y 6-4 sobre la china Lin Zhu (87ª) y se aseguró su plaza en los cuartos de final.
Un tenis perfecto, digno de los viejos tiempos. Agresiva, sólida y dispuesta a luchar cada pelota como si recién se iniciara en el circuito. La experiencia de Azarenka fue un factor decisivo en el compromiso de octavos de final. Tras un 4-6, la ganadora de las ediciones 2012 y 2013 se lució en la Rod Laver Arena y fue una justa vencedora ante una rival que por momentos brilló pero que pecó de inocente en algunos puntos claves.
Cabe mencionar que esta edición del Australian Open no contó con la defensora del título, Ashleigh Barty, la tenista local que anunció su retiro poco tiempo después de consagrarse campeona y ocupando el número uno del ranking WTA. Así, el evento comenzó con solo dos ganadoras del major aussie: Azarenka y la estadounidense Sofia Kenin. Y para colmo, el sorteo las enfrentó en primera ronda, donde Vika eliminó a la ganadora del 2020.
Con triunfos ante Kenin, la argentina Nadia Podoroska, la estadounidense Madison Keys y la china Zhu, la dueña de 21 títulos WTA jugará instancia de cuartos de final en Melbourne Park por primera vez desde 2016 y la segunda de Grand Slam en los últimos siete años (US Open 2020).
Su rival será la estadounidense y número tres del mundo Jessica Pegula, quien tras las derrotas de la polaca Iga Swiatek y la tunecina Ons Jebeur, es la máxima favorita a la corona y viene con un andar exultante.
Se enfrentaron cuatro veces y se dividieron triunfos. El registro más reciente tuvo lugar en Guadalajara, México, y fue victoria de la top 5, quien también la derrotó en Australia 2021.