En un verdadero partidazo, de esos que dejan sin aliento a los espectadores y a las propias protagonistas, Elena Rybakina (4ª) volvió a ser la pesadilla de Iga Swiatek (1ª).
En instancia de semifinales del WTA 500 de Stuttgart, la kazaja se impuso 6-3, 4-6 y 6-3 en un match que rozó las tres horas netas de juego, totalizando hasta 20 bolas de break y salvando un 84% de las que recibió.
De esta manera, el historial entre dos de las principales animadoras del circuito femenino se estiró 5-3 a favor de la nacida en Moscú, Rusia, de 24 años y dueña de siete títulos, destacándose su consagración en Wimbledon 2022, contando incluso duelos de exhibición.
En consecuencia, la versátil diestra se clasificó a su quinta final durante la actual temporada, luego de Brisbane, Abu Dhabi, Doha y Miami, y le quitó el invicto de diez partidos a su rival. Desde 2021 que no había una final en Stuttgart sin Swiatek. De hecho, es la primera vez que pierde en este torneo. Aquel año lo ganó Ashleigh Barty, derrotando a Aryna Sabalenka en la final.
Se enfrentará a la ucraniana Marta Kostyuk (27ª), que se impuso a la checa Marketa Vondrousova (8ª), cabeza de serie número 6, por 7-6 (2) y 6-2.