Novak Djokovic derribó a Steve Smith (estrella del cricket australiano), atropelló a Peter Bol (atleta de 800 metros) y bromeó con la campeona defensora del torneo, Aryna Sabalenka, en una noche de diversión y frivolidad en Melbourne Park.
También agitó el aro para mostrar sus destrezas en el básquet, se estiró con la gimnasta australiana Georgia Godwin, tuvo una agradable charla con Nick Kyrgios y tomó el mando desde la silla del umpire en el Rod Laver Arena.
El diez veces campeón del Australian Open se confirmó como el rey indiscutible de Melbourne Park durante "Una noche con Novak y sus amigos".
Después de derrotar a Stefanos Tsitsipas en un set de exhibición, una 'revancha' de la final del Abierto del año pasado, el número uno mundial deslumbró a una multitud en el evento benéfico e incluso mostró su magia en silla de ruedas para ayudar a recaudar dólares para la Fundación del Abierto de Australia.
"Concéntrate, Novak, concéntrate", le dijo Sabalenka mientras él imitaba a su compañera de dobles que intentaba sacar. Le ganaron a los griegos Tsitsipas y Sakkari pero ganó el público.
Ahora le toca ponerse serio. Esperar su rival (saldrá de la clasificación) y echarse a andar su camino por un trofeo más en uno de sus torneos predilectos.