Luego de las confrontación de Coco Gauff (2ª) ante la umpire y las reglas del tenis, París 2024 se adueñó este martes de otra polémica, también iniciada en el terreno de juego y continuada en los medios de comunicación, a raíz de las declaraciones públicas de la estadounidense Emma Navarro (15ª) contra la china Qinwen Zheng (7ª), que se impuso 6-7 (7), 7-6 (4) y 6-1 para acceder a cuartos de final.
"Solo le dije que no la respeto como competidora. Creo que se maneja de una manera bastante despiadada, convirtiendo un vestuario sin mucha camaradería. Es díficil entrentar a una rival así, que realmente no respeto. Igualmente la felicito, jugó un gran tenis al final, mucho mejor que yo", expresó la nacida en Nueva York, de 23 años y última campeona en Hobart, que había superado a la austriaca Julia Grabher (337ª) y a la búlgara Viktoriya Tomova (46ª) en las rondas previas.
Posteriormente, la talentosa zurda, de 21 y elegida como la jugadora más mejorada de 2023, comentó su postura: "Me dijo que no sabe cómo tengo tantos fanáticos. Parece que no está contenta con mi comportamiento hacia ella. Si es así puede venir y decírmelo, me gustaría corregirlo para ser mejor jugadora y persona. Estoy contenta que me lo haya dicho, no lo considerará como un ataque porque perdió el partido".
En la próxima instancia, la pasada finalista del Abierto de Australia enfrentará a la experimentada alemana Angelique Kerber (212ª), medallista plateada en Río 2016, que se deshizo de la canadiense Leylah Fernández (25ª) y afronta su última experiencia como profesional.