Naomi Osaka (73ª del ranking WTA) preocupó esta semana cuando debió retirarse de los octavos de final del WTA 1000 de Beijing cuando enfrentaba a Coco Gauff (6ª). Días después, la japonesa reapareció en redes sociales contestando a alguien que tildó su carrera como un "golpe de suerte".
"Recién vi que alguien me llamó "golpe de suerte". ¿Cómo es posible que sea "un golpe de suerte" con cuatro títulos de Grand Slam, habiendo encendido la llama olímpica, ganándole a múltiples Top 20 y estando cerca del Top 50 a un año de dar a luz? Sal de aquí, no podrías siquiera arañar uno de mis logros", respondió sin eufemismos la ex número uno del mundo en sus redes sociales.
Osaka regresó a la competencia en 2024 luego de haberse convertido en madre. Inició la temporada sin ranking y, gracias a actuaciones como los cuartos de final en el WTA 1000 de Doha y en el 250 de s-Hertogenbosch, ingresó en el Top 75 en tiempo récord.
Ella misma confesó que está disfrutando como nunca antes su vuelta al tenis y lo ha demostrado apareciendo en las giras de polvo de ladrillo y césped, etapas del calendario que solía saltarse en el pasado, haciendo mayor hincapié en el calendario de canchas duras.
En el inicio de la gira asiática, dio buenas señales arribando a octavos de final en Beijing pero cuando estaba en control de la situación frente a Coco Gauff, una molestia en la espalda la obligó a retirarse del encuentro. Posteriormente, aclaró que había sentido molestias en la previa del partido pero igualmente quiso intentarlo.
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