Las críticas públicas del entrenador croata Goran Ivanisevic hacia su pupilo griego Stefanos Tsitsipas marcaron el inicio del fin de la efímera relación laboral entre ambos, la cual había comenzado con éxito en el ATP 500 de Halle y se diluyó en un santiamén.
Pese a gozar de vasta experiencia en la materia, el nacido en Split, de 53 años y recientemente protagonista de otra abrupta salida al dimitir del equipo de la kazaja Elena Rybakina, recibió diversas reprobaciones dentro del circuito masculino, tal como su colega francés Patrick Mouratoglou, por exponer al ex número 3 del mundo, de 26, el cual lo catalogó de dictador al hablar mal de él, no valorar el esfuerzo ni generar un ambiente de trabajo agradable, en declaraciones al medio SDNA.
La respuesta no tardaría en llegar de parte del campeón de Wimbledon 2001, quien manifestaría su punto de vista al respecto en una entrevista con HRT: "Hablamos ayer, sin rencores, nos dimos las gracias. Decidió intentarlo de nuevo con su padre y, sinceramente, lo creo de verdad. La única persona que puede entrenarlo es su padre. Jugó su mejor tenis con él, su padre lo conoce mejor. Este es un proyecto familiar. Es la mejor decisión, le deseo todo lo mejor. Es demasiado buen jugador para estar donde está".
"Ayer le volví a decir que nada cambiará a menos que arregle algunas cosas en su cabeza. Se exageró todo, yo no lo insulté. Le dije todo eso, no es que lo dijera a sus espaldas. Ahora parece que ya no se puede decir nada. Lo dije con sinceridad, para obtener una reacción. Así es esta generación. Desafortunadamente, así es, todo el mundo lo ve", prolongó el potente zurdo, que también supo guiar a su compatriota Marin Cilic (64°), al checo Tomas Berdych y al legendario serbio Novak Djokovic (6°).
Posteriormente, el dueño de 22 títulos en el Tour hizo hincapié en la importancia de la dedicación y le auguró lo mejor: "Él también lo siente y lo sabe. Si no estás preparado mental, física y emocionalmente, sobre todo mentalmente, para jugar durante horas con los mejores, no tienes ninguna posibilidad de jugar al tenis. No estaba mentalmente preparado para jugar en Wimbledon. Espero que encuentre su camino. Le deseo todo lo mejor, conocemos los resultados que ha obtenido. No se le ha olvidado jugar al tenis".
Cabe destacar que el ateniense, dos veces finalista de torneos de Grand Slam y tricampeón del Masters 1000 de Monte-Carlo, el cual se retiró por lesión en su estreno de Wimbledon y registra su peor posición en el ranking mundial ATP desde julio de 2018, tan solo pondrá en juego 510 puntos en lo que resta de temporada.
