En casa suele ser mejor. Qué mejores ejemplos de jugar de locales en la Copa Davis que lo visto este fin de semana en las semifinales. Francia, con Jo-Wilfried Tsonga como héroe, cerró la serie por 3-1 sobre Serbia y se metió en la final. Lo mismo hizo Bélgica, también sobre arcilla, tras arrancar el domingo en desventaja, pero avanzó a la definición gracias a los triunfos de David Goffin y Steve Darcis.
En Lille, Francia escribió otra página rica en su historia copera. Tsonga, en gran forma, se recuperó tras un débil arranque y dejó afuera a la Serbia que padeció la baja con aviso de Novak Djokovic, lesionado y alejado de las canchas hasta el próximo año.
Tsonga, con pasado de Top 10 mundial y ahora 18º ATP, superó a Lajovic (80º) por 2-6, 6-2, 7-6 (5) y 6-2 y así el anfitrión remató la semifinal, en la que no se realizó el quinto encuentro. Para Francia se trata de su 18º salto a la final de la Copa Davis y buscará su 10ª conquista, la primera desde 2001.
Unas horas después, Bélgica le siguió los pasos. Pero le dio mucho más trabajo. Había accedido 1-2 al tercer y decisivo día y fue Goffin (12º) quien le ganó al australiano Nick Kyrgios (20º) en un partidazo, por 6-7 (4), 6-4, 6-4 y 6-4. Así, en un choque muy atractivo, emocionante y con grandes puntos, empató el local la serie y prolongó la lucha.
Y fue Steve Darcis (77º) quien dio otra muestra de que le sienta bien la Davis. No enfrentó a John Millman (185º), ya que el capitán visitante, Lleyton Hewitt, decidió poner en el último single a Jordan Thompson (70º), en firme ascenso. Pero, apoyado por su gente, fue más sólido Darcis, que ganó 6-4, 7-5 y 6-2 y desató la locura en Bruselas.
De esta manera, Bélgica avanzó a su tercera final en la mítica Copa Davis y tratará de coronarse por primera vez. Su definición más reciente la perdió en 2015, ante Gran Bretaña, siendo local, mientras que del 24 al 26 de noviembre visitará a la Francia de Tsonga, con Yannick Noah como capitán. Será otra oportunidad importante, aunque también de riesgo en suelo galo.