¿Sellarán la serie los Nuggets este jueves o podrán volver a encontrar su racha imparable los Timberwolves?
Dos juegos después de comenzadas las semifinales de la Conferencia Oeste de la NBA, los Minnesota Timberwolves no sólo estaban venciendo a los campeones defensores, sino que los estaban castigando.
La defensa de los Wolves, clasificada número uno en la liga durante la temporada regular, pasó de ser impenetrable en el Juego 1 a francamente absurda en el Juego 2 contra los Denver Nuggets. Y a pesar de extrañar al cuatro veces Jugador Defensivo del Año Rudy Gobert, quien estuvo apartado del equipo por el nacimiento de su primer hijo, los defensores acosadores de Minnesota solo parecieron multiplicarse.
"Escuché a alguien decir que eran como siete Timberwolves en la cancha", le dijo el alero de Minnesota Jaden McDaniels a ESPN al principio de la serie. "Realmente se siente así cuando juegas a la defensiva [con este equipo]".
Después de ganar el Juego 1 como visitante, los Wolves acosaron al escolta de los Nuggets, Jamal Murray, hasta lograr una actuación de 1 de 10, limitaron al centro Nikola Jokic a ocho puntos, obligaron al tres veces Jugador Más Valioso a cometer cuatro pérdidas de balón y limitaron a Denver a un 32.6% de tiros rumbo a una ventaja de 26 puntos al medio tiempo del Juego 2.
Tampoco se trataba sólo de un reconocimiento adecuado y rotaciones defensivas. Había cierto estilo en los asfixiantes esquemas de Minnesota.
Un clip de Nickeil Alexander-Walker, el espigado escolta de los Wolves, de 6 pies 5 pulgadas, presionando a Murray en toda la cancha se volvió viral y mostraba a Alexander-Walker mostrándole una sonrisa casi maníaca en el rostro de Murray después de absorber un golpe en el cuerpo cuando Murray intentó liberarse en el círculo central. "Estaba tan perdido en el flujo de todo", dijo Alexander-Walker después del Juego 2.
La presión de Minnesota sobre el balón aumentó aún más cuando McDaniels se unió a Alexander-Walker. La doble marca del dúo molestó a Murray hasta el punto en que el escolta normalmente estable tuvo que deshacerse del balón o arriesgarse a perder el balón.
Los Wolves, dos juegos adentrados a su primera aparición en semifinales de conferencia en 20 años, fueron los héroes de la liga.
Anthony Edwards, de 22 años, escuchó comparaciones con Michael Jordan por anotar 70 puntos durante el inicio de 2-0 de los Wolves. McDaniels, de 23 años, a quien el entrenador de Minnesota Chris Finch a veces se refiere como "Scottie Pippen" y quien le dijo a ESPN: "Parece que mis extremidades siguen creciendo [y] a veces es difícil incluso controlar mis brazos porque son tan largos", estaba siendo aclamado como un prototipo de tapón defensivo.
Pero sólo 10 días después, los Wolves han perdido tres juegos consecutivos por primera vez en toda la temporada y están al borde de la eliminación de cara al Juego 6 del jueves en casa (8:30 pm ET por ESPN). Con dos juegos que tienen que ganar por delante para salvar una de las temporadas más exitosas de la franquicia, ¿cómo pasó Minnesota de ser el mejor del mundo al borde de la eliminación?
Al quedarse peligrosamente atrás en una de las partidas de ajedrez más intrigantes de esta postemporada.
Stephen A. Smith analiza las tres derrotas consecutivas de Minnesota Timberwolves ante Denver Nuggets.
Los Nuggets cambiaron la forma en que utilizan a Murray
El calendario permitió un raro descanso de tres días mientras la serie se trasladaba de Denver a Minneapolis para el Juego 3. Mientras los Wolves esperaban una suspensión que nunca llegó, y Murray fue multado con 100,000 dólares por arrojar una toalla y una almohadilla térmica a la cancha en señal de frustración en medio de la victoria de Minnesota por 106-80 en el Juego 2, el tiempo libre resultó beneficioso de varias maneras para los Nuggets.
Murray, que estaba lidiando con una distensión en la pantorrilla izquierda que sufrió en la primera ronda contra Los Angeles Lakers, tuvo la oportunidad de descansar. Mientras tanto, el entrenador de Denver, Michael Malone, tuvo la oportunidad de adaptarse.
Malone profundizó en las películas de los dos primeros juegos de la serie, buscando una manera de hacer que Murray se pareciera más al jugador que se ganó la reputación de ser uno de los mejores jugadores de los playoffs de la liga.
Malone lo encontró: quitándole el balón de las manos a su base armador y haciendo que Jokic o el alero Aaron Gordon iniciaran la ofensiva. Gordon, por su parte, subió el balón en 15 posesiones en el Juego 3 después de hacerlo solo 17 veces en los Juegos 1 y 2.
Los toques extra continuaron extendieron el ritmo ofensivo de Gordon. Después de anotar 20 puntos con un 57.1% de tiros en el Juego 2, promedió 19.7 puntos con un 69.7% en las siguientes tres victorias de los Nuggets.
La activación de Gordon no solo salvó a Murray de ser presionado a lo largo de 94 pies, sino que también impidió que Gobert (7 pies 1 pulgada) se posicionara fuera del balón como un protector de aro itinerante. Y después de anotar solo ocho puntos con 3 de 18 tiros en el Juego 2, Murray anotó 24 puntos con 11 de 21 tiros en el Juego 3 cuando los Nuggets derrotaron a los Wolves en su propia cancha.
"Como va Jamal, vamos nosotros", le dijo una fuente de los Nuggets a ESPN después del Juego 3. "Muy simple".
Murray siguió adelante en los Juegos 4 y 5, promediando 17.5 puntos con un 48.4% de tiros y seis asistencias en dos victorias más para poner a los Nuggets arriba 3-2.
Denver explotó la táctica aún más en los Juegos 4 y 5. En cada uno de esos partidos, Gobert defendió al jugador que subió el balón en 18 posesiones, según datos de monitoreo de Second Spectrum, empatado por su tercera mayor cantidad en un juego a lo largo de sus 11 años de carrera.
En el juego 5 de la serie, el serbio se destacó con 40 puntos, 13 asistencias y 7 rebotes en el triunfo 112-97. Aaron Gordon anotó 18 para poner el 3-2 para los Nuggets. Towns fue el mejor en la caída con 23 unidades.
El MVP cocinó al Jugador Defensivo del Año, al ser aún más lento
Después de perder dos juegos en casa, los Nuggets le devolvieron el favor ganando los juegos 3 y 4 dentro del Target Center de Minnesota. Pero Edwards los hizo sudar por ello.
Él anotó 44 puntos en el Juego 4, alcanzando la marca de los 40 puntos por tercera vez en esta postemporada. Si no fuera por una racha de 8-0 de Denver en los últimos 20 segundos del segundo cuarto o Karl-Anthony Towns acertando 1 de 10 en la primera mitad en camino a una noche de 5 de 18, Minnesota bien podría haber sido el equipo en búsqueda de ganar la serie el jueves.
El Juego 5 le perteneció únicamente a Jokic. Y el pívot de los Nuggets realizó una actuación digna del trofeo de MVP que recibió de manos del comisionado de la NBA, Adam Silver, antes del partido.
Después de que los Wolves mantuvieron a Jokic relativamente bajo control en los Juegos 1 y 2 (promedió 24 puntos, 12 rebotes y 8.5 asistencias, pero disparó un 42.1% desde el campo, un 20% de triples con 5.5 pérdidas de balón), McDaniels todavía desconfiaba de la fuerza que estaban enfrentando.
"El solo hecho de que él camine en la cancha hace que se nos enciendan las antenas", le dijo McDaniels a ESPN antes del Juego 3. "Sólo para esta serie, cuando [Jokic] recibe el balón, tratamos de llegar a nuestro hombre porque sabemos cuán bueno es como pasador.
"Él también puede anotar. Preferimos dejarlo anotar, en realidad. Sólo porque, ¿dejar que todos los demás se involucren? Se acabó, hombre".
Jokic hizo ambas cosas en el Juego 5, anotando 40 puntos en 15 de 22 tiros y repartiendo 13 asistencias sin pérdidas de balón. Lo hizo yendo directo hacia Gobert. Después de disparar sólo 11 de 28 (39.3%) con Gobert como su principal defensor durante los primeros cuatro juegos de la serie, Jokic disparó 8 de 9 contra él (88.9%), según la investigación de ESPN Stats & Information.
"Sólo estoy tratando de leer y ser agresivo", dijo Jokic después de la victoria del martes. "Hoy fue una muy buena noche para mí".
También fue una noche metódica. Si bien Jokic tradicionalmente es rápido en realizar sus movimientos ofensivos (realizando un promedio de 1.44 regates por intento de gol de campo en la temporada regular, ubicándose en el puesto 46 entre 52 jugadores con 1,000 o más tiros, según Second Spectrum), dribló el balón mucho más en el Juego 5.
En 14 toques para Jokic que comenzaron en la mitad de la cancha con Gobert sobre él, Jokic promedió 2.36 regates por toque con una duración promedio de toque de 5.0 segundos. Fue la duración promedio de toque más larga y la mayor cantidad de regates por toque que Jokic haya tenido contra un defensor en sus nueve años de carrera, temporada regular o playoffs (entre juegos con un mínimo de 10 toques directos contra un solo defensor). Para Denver, era otra forma de limitar que Gobert desempeñara su papel preferido de vagabundo en la línea de fondo.
"Sabemos que es un tipo de jugador 1 de 1. Sabemos que va a hacer jugadas increíbles", dijo Gobert sobre Jokic después del Juego 5. "Pero tenemos que seguir así. Tenemos que seguir poniéndoselo difícil. ... tenemos que seguir jugando y volviendo hacia él".
Al Ant-Man le falta su compañero de defensa
Lo único con lo que los Wolves pudieron contar a lo largo de la serie (la excelencia de Edwards) recibió un golpe en el Juego 5.
Con el escolta veterano Mike Conley fuera de juego por un dolor en el tendón de Aquiles derecho, los Nuggets acosaron a Edwards por toda la cancha de la misma manera que los aleros de los Wolves lo hicieron con Murray al comenzar la serie. (Conley estaba "50-50" para jugar en el Juego 5 antes de ser descartado y todavía hay esperanzas de que juegue en el Juego 6, le dijo una fuente de los Timberwolves a ESPN).
Sin Conley para compartir las tareas de manejo del balón el martes, Edwards controló la acción más que en toda la temporada. Sus 102 toques empataron la segunda mayor cantidad que ha tenido en un juego en toda su carrera, incluyendo la temporada regular y los playoffs, según Second Spectrum.
Y los Nuggets siguieron enviándole cuerpos. Las 29 doble marcas que Edwards enfrentó en el Juego 5 fueron más de las que enfrentó en los primeros cuatro juegos de la serie combinadas.
"Esto fue una locura", dijo Edwards sobre la atención defensiva adicional después de terminar con 18 puntos y acertando 5 de 15 tiros. "Hoy fue una locura, sin duda. Sí, hoy fue salvaje".
Que es una palabra apropiada para describir la serie en su conjunto. Anticipación salvaje. Actuaciones salvajes. Giros salvajes. Y ajustes salvajemente exitosos por parte de los campeones defensores contra un equipo de los Wolves que ahora tiene la tarea de hacer el suyo.