NUEVA YORK -- Kevin Seraphin estuvo muy distraído con todo lo que sucedió en la capital de Francia, para estar totalmente concentrado en juego de baloncesto.
El nativo de la Guayana Francesa, que no jugó la noche del viernes, otra vez demostró su solidaridad con el pueblo francés dos días luego de los ataques terroristas que cobraron las vidas de 132 personas y dejaron más de 300 heridos en París.
El ala-pívot de los New York Knicks despertó temprano la mañana del domingo antes de arribar al Madison Square Garden para un partido contra los New Orleans Pelicans, y llamó a su barbero para que le hiciera un corte de pelo especial.
Detrás de su cabeza pidió que se le hiciera una inscripción de “París” y añadió un dibujo de la Torre Eiffel.
Con la imagen de la bandera de Francia recubriendo la pantalla de video que está colgada directamente sobre el centro de la pista del MSG y otra imagen de la bandera tricolor que alumbraba la cancha del conjunto de la Capital del Mundo, un emotivo Seraphin entonces luchaba contra si mismo, cantando el himno nacional de Francia mientras aguantaba las lagrimas antes de salir y aportar a la ofensiva y defensiva en la victoria 95-87 de los Knicks.
“Tenía la piel de gallina. Quería llorar (pero) la cámara estaba ahí”, aseveró. “Pero fue como que no pude hacer eso. Fue muy emocional. También estaba cantando”.
Tras un aletargado desempeño de los Knicks en ambos costados de la cancha durante la primera mitad que los locales perdían 44-42 ante uno de los peores conjuntos defensivos de la liga, el entrenador en jefe Derek Fisher señalaba en dirección del francés restando 4:58 en el tercer periodo mientras New Orleans llevaba ventaja de 55-44.
Seraphin, quien se enorgullece en poder salir del banquillo y contribuir ofensivamente y defensivamente, tomó ventaja de una oportunidad que no estaba recibiendo en los primeros 10 partidos de la temporada.
El jugador de 25 años de edad utilizó cada uno de los 14 minutos que su coach le dio para superar la tristeza que estaba sufriendo, y terminó la tarde con 12 puntos, tres rebotes ,dos asistencias y un robo de balón.
Seraphin aportó su granito de arena mientras los Knicks aumentaban su ventaja a 10 puntos en el cuarto parcial.
Hubo una jugada en la cual estuvo doble marcado debajo del aro y encontró a Lance Thomas, asistiéndole en su bandeja que puso el partido 76-68 con 8:36 por jugar. Un par de segundos después, Seraphin encestó un gancho sobre el alcance del Todo Estrella Anthony Davis, de nuevo aumentando la ventaja a ocho puntos. Minutos después mientras Davis lo marcaba, Seraphin falló su gancho a siete pie del aro pero se mantuvo activo, recuperó el rebote mientras Ryan Anderson intentaba agarrar el balón y completaba la jugada con una bandeja que puso a Nueva York arriba 82-72 faltando 6:36 en el reloj de juego.
Carmelo Anthony, el Todo Estrella y líder de los Knicks, que lograron detener un racha de dos derrotas, comendó el esfuerzo de Seraphin bajo las circunstancias que estaba enfrentando tras los hechos terroristas, cuya responsabilidad fue reclamada por el grupo radical islamista autodenominado como el Estado Islámico.
Si los Knicks premiaran a un jugador con un balón tras una victoria, Seraphin entonces era digno de recibirlo.
“Él se lo mereció. Estuvo listo. Entró y fue una gran parte de esa corrida que hicimos en la segunda mitad”, señaló Anthony, quien lideró a Nueva York con 29 puntos y 13 rebotes.
“Sólo verlo y con lo que está lidiando y por lo que está pasando emocionalmente y mentalmente, el hecho que estuvo preparado cuando su número fue llamado fue grande”.
Lo único que Seraphin creé que puede hacer ahora es mantener su nivel de profesionalismo mientras su corazón llora por sus compatriotas allá en el viejo continente.
“Allá sólo es una locura. No hay nadie en la calle. Hay nada”, dijo.
“Es difícil porque puede suceder en todo y cualquier lugar. Uno nunca sabe. Eso como que da miedo porque mi familia, mi madre y mi padre viven en París”, continuó. “Pero en un punto no podemos estar asustados y tenemos que luchar a través de eso. Yo también juego para los Knicks. Debo ser profesional y ellos básicamente me pagan para algo. Así que básicamente tengo que continuar trabajando. Es un tiempo difícil pero tenemos que mantenernos firme”.