LAKELAND -- El lanzador puertorriqueño Joe Jiménez ya tiene de nuevo su casillero en el camerino de los Tigres de Detroit en el Estadio Joker Marchand, sede de entrenamiento primaveral del equipo en Lakeland, Florida.
Y Jiménez confía en que esta primavera su desempeño le merezca su propio lugar en Comerica Park, en Detroit.
Jiménez recibió su segunda convocatoria al campamento primaveral de los Tigres tras un excepcional 2016, una campaña de vertiginoso acenso a través de las ligas menores que ha hecho que los evaluadores de talento prácticamente coronen al boricua como el futuro taponero en Detroit.
Armado de una poderosa y eléctrica recta que ronda las 100 millas por hora, el derecho de 22 años registró una efectividad 1.51 en 53 y dos tercios de entradas en los tres niveles de ligas menores el año pasado, donde lanzó 15 y dos tercios de inning en Triple A.
''El año pasado pues me desarrollé bien en las ligas menores y pude aprender de cada liga un poquito'', dijo Jiménez a ESPN Digital. ''Eso me hizo llegar a Triple A. Todos los años se aprende algo nuevo; pienso que eso es lo que me ha ayudado''.
Con el cerrador venezolano Francisco Rodríguez estando bajo contrato por sólo una temporada más, Jiménez podría ser una legítima competencia para Bruce Rondón para el rol de taponero en caso de lesión o de canje.
Unido a Rondón, Justin Wilson y, de mantenerse saludable, Shane Greene, Jiménez completaría un formidable cuerpo de juveniles relevistas en los Tigres.
No obstante, es muy probable que el debut de Jiménez no se dé hasta más tarde en la temporada, en particular después del mes de junio, ya que no daría así por iniciado su año de servicio y extendería el tiempo que permanecería bajo control del equipo.
''La verdad eso es decisión de ellos'', dijo el derecho sobre si existe la posibilidad de arrancar la temporada con el equipo grande desde el Día Inaugural. ''Tengo la oportunidad de hacer el equipo y sino pues voy a Triple A y hacer lo posible para que me suban''.
''Cada vez que hablo con los pitching coaches, ellos lo que me dicen es que tengo que trabajar en los pitcheos secundarios y trabajar en la zona de strike y eso es lo que estamos trabajando este año para ver si damos el próximo paso''.
Jiménez tendrá la oportunidad de tener una singular preparación esta primavera al medirse a peloteros del calibre de Grandes Ligas en el próximo Clásico Mundial de Béisbol, en lo que será su primera participación con el equipo de Puerto Rico.
El equipo de Puerto Rico ya cuenta en su roster con el lanzallamas de los Marineros de Seattle, Edwin Díaz, como posible cerrador, por lo cual se anticipa que junto a Jiménez podrían ser una dupla tan temible como el dúo dominicano de Dellin Betances y Jeurys Familia.
Jiménez y Díaz son los dos relevistas de mayor octanaje en el cuerpo de lanzadores de Puerto Rico, lo cual es considerado por muchos la mayor debilidad del equipo boricua, que quedó segundo en el pasado Clásico al ser derrotado por el campeón República Dominicana.
No obstante, Jiménez, quien en 2013 estuvo limitado a ser un aficionado en las gradas, confía en que la selección boricua hará un digno papel.
''Me siento bien orgulloso de estar con todos esos muchachos y representar a Puerto Rico'', dijo. ''En verdad yo pienso que tenemos buen equipo''.
''En 2013 nadie pensaba que Puerto Rico iba llegar hasta lo último y yo diría que la mitad del equipo era desconocido por decirlo así, y llegaron segundos. Este año tenemos un muy buen equipo, yo diría que mejor que el de 2013, y de verdad vamos a dar un buen show en el Clásico''.