El pelotero dominicano Robinson Canó no guarda rencor hacia los New York Mets y está listo para seguir con su carrera en otro equipo, inmediatamente se cumpla el plazo para convertirse en agente libre en las Grandes Ligas del béisbol estadounidense.
"Siento respeto por todos esos muchachos, los quiero mucho a todos. La pasé bastante bien [con los Mets]", dijo Canó el miércoles, durante una entrevista con la antesala de la transmisión radial de los Mets en español.
"De verdad que en esto no hay ningún sentimiento [negativo], sabemos que es un negocio. Sé que fue una decisión difícil para la organización, pero al final del día es un negocio y acepto la decisión. No hay ningún tipo de sentimiento [negativo] hacia ellos", dijo Canó, quien bateó .269 en 168 partidos con la camiseta de los Mets.
"Le deseo lo mejor [a los Mets]", agregó.
Canó, de 39 años, fue puesto en asignación por Nueva York el lunes, cuando las nóminas de Grandes Ligas fueron reducidas de 28 a 26 jugadores. El ocho veces Todos Estrellas y múltiple ganador del Guante de Oro bateaba .195 (41-8) con un jonrón y tres carreras impulsadas en 12 partidos con los Mets, después que se perdió la temporada completa del año pasado, cumpliendo una segunda suspensión por violar la política antidopaje del béisbol.
Los Mets son responsables de la mayor parte de los $40,5 millones de dólares que el astro quisqueyano tiene pendiente por cobrar hasta el 2023, de un contrato de $240 millones por 10 años que firmó con los Seattle Mariners antes de la temporada del 2014.
El jugador será elegible para convertirse en agente libre y firmar con otro equipo, que solamente tendría que pagarle la proporción del salario mínimo ($700 mil dólares) en base a los días que permanezca en la nómina regular el resto de la temporada.
"Estamos en el proceso. Espero que Dios tenga algo bueno para mi", dijo Canó. "Esto es un negocio y hay que estar preparado para lo que venga. Los equipos llaman y preguntan. No se puede dar mucha información. Es mejor dejar que las cosas ocurran y después hablar", agregó.
Acerca de su lento arranque, Canó, un bateador de .302 en 8,714 turnos en Grandes Ligas, evitó poner excusas, pero mencionó las malas condiciones del tiempo en el primer mes de la actual temporada.
"Todos sabemos que no es lo mismo batear en el frío que en el calor. Ojalá en el lugar que me toque ahora, pueda tener la oportunidad de seguir haciendo lo que sé hacer", dijo Canó.