El poderoso bateador dominicano parece haber encontrado el ritmo que había perdido con la llegada a la “Ciudad de los Vientos”.
Cuando la campaña 2022 de las Grandes Ligas inició, Franmil Reyes era considerado una parte indispensable del núcleo de Cleveland Guardians, quienes tenían una oportunidad real de competir por el liderato divisional y regresar a la postemporada. El dominicano venía de una productiva temporada que lo vio conectar 30 cuadrangulares y remolcar 85 carreras, mientras que bateó para promedio de .254 y OPS de .846, el mejor de su carrera.
Al llegar el mes de agosto y luego de mostrar inconsistencia ofensiva, así como problemas de salud, los Guardians decidieron que era suficiente y designaron al pelotero para asignación. Un par de días más tarde y de forma inesperada, Chicago Cubs, un equipo en aparente reconstrucción decidió tomar el riesgo de llevarse a Reyes y colocarlo como parte de su plan de acción.
Hasta el momento, la muestra de partidos ha sido sumamente corta, sin embargo, es notorio lo que Reyes está haciendo dentro de un equipo con menos apoyo ofensivo, en una división con rivales más complicados y con estadios que favorecen a los lanzadores (en su mayoría).
Seis juegos han transcurrido desde que “La Mole” se incorporó a la alineación de los Cubs y los resultados han sido sorprendentes. Reyes batea para promedio de .346 con porcentaje de embasarse (OBP) de .346 y slugging (SLG) de .692. Ha despachado dos vuelacercas y remolcado cinco carreras en su breve paso por la escuadra. Su OPS+ de 181 muestra la historia del sorprendente inicio del bateador designado.
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Reyes ha demostrado en repetidas ocasiones durante el pasado que tiene la capacidad de generar poder, sin embargo, su propensión a poncharse y las pocas bases por bolas que recibe hacen que sus estadísticas generales se vean afectadas. De hecho, además del tema de salud que le ha afectado, Los lanzadores han cambiado radicalmente la estrategia contra el dominicano, utilizando más lanzamientos rompientes que en 2021 en su contra, lo que le ha llevado a tomar peores turnos, por eso sus resultados negativos con los Guardians.
Que Reyes pueda mantener el gran ritmo ofensivo dependerá mucho de los ajustes que pueda realizar, pero sus primeros seis juegos con los Cubs dan testimonio de que aún conserva talento suficiente para jugar en Grandes Ligas.