Yankees y su manager Aaron Boone sentían confianza en que llegarían a Serie Mundial, pero Blue Jays frenó sus expectativas
NUEVA YORK -- A última hora del miércoles y hasta la madrugada del jueves, mientras los asistentes del clubhouse pegaban cajas con cinta adhesiva para que los jugadores las empacaran y todos se despedían para pasar el invierno, una sensación de incredulidad se cernía sobre los New York Yankees.
Desde el manager Aaron Boone hasta el superestrella Aaron Judge, los Yankees creían que este equipo era más talentoso, más completo y estaba mejor preparado para afrontar octubre que el club que llegó a la Serie Mundial el año pasado.
Pero los Yankees de 2025 no llegarán a la Serie Mundial. Ni siquiera llegaron a la Serie de Campeonato de la Liga Americana. Su temporada terminó el miércoles por la noche con una derrota por 5-2 ante los Toronto Blue Jays en el cuarto juego de la Serie Divisional de la Liga Americana en el Yankee Stadium, extendiendo su sequía de campeonatos a su decimosexta temporada, la tercera más larga en la historia de la franquicia.
"Es difícil de describir", dijo Judge. No hicimos nuestro trabajo, no logramos el objetivo. Teníamos un grupo especial aquí, muchos jugadores especiales que hicieron que este año fuera divertido, pero no obtuvimos el premio máximo, así que nos quedamos cortos.
El obstáculo para que los Yankees llegaran a la serie de campeonato fue el equipo que les impidió ganar el título de la División Este de la Liga Americana. Toronto tuvo un récord de 8-5 contra los Yankees durante la temporada regular para obtener el desempate que resultó ser la diferencia para pasar la ronda de Comodines, cuando los equipos terminaron con el mismo récord de 94-68, el mejor de la Liga Americana.
Pero a pesar de lo adversos que fueron los dos primeros juegos de la serie para los Yankees (Toronto los superó 23-8 en palizas en el Rogers Centre), se presentaron al trabajo el miércoles con mucha confianza, en plena forma después de que Judge, fulminante en el plato en esta postemporada, conectara un monumental jonrón de tres carreras en el Juego 3 que ayudó a extender su temporada.
En teoría, tenían la ventaja de pitcheo: el novato Cam Schlittler, quien venía de una histórica actuación de ocho entradas en la Serie de Comodines, se enfrentaba a un grupo de relevistas conocidos en el compromiso 21 del año entre los rivales de división. Si ganaban, la presión se trasladaría a los Blue Jays para evitar un colapso en el quinto juego en casa.
Schlittler no se parecía a la fuerza dominante que mantuvo a los Boston Red Sox sin carreras en un juego de eliminación la semana anterior, pero lanzó lo suficientemente bien como para darle a Nueva York la oportunidad de evitar la eliminación. Sin embargo, los Yankees desaprovecharon la oportunidad, anotando sólo dos carreras en seis hits. Dejaron a dos corredores en base en la sexta y séptima entradas, y dejaron las bases llenas en la octava.
"Es brutal", dijo el campocorto de los Yankees, Anthony Volpe, quien terminó la serie de 15-1 con 11 ponches. "Estoy en shock".
Los Blue Jays conectaron 12 hits más para terminar con 50 en la serie y superaron a Nueva York 34-19 para llegar a la Serie de Campeonato de la Liga Americana por primera vez desde 2016. Las 34 carreras fueron la cuarta mayor cantidad anotada en los primeros cuatro juegos de postemporada de un equipo. Vladimir Guerrero Jr. lideró la ofensiva, yéndose de 17-9, con tres jonrones y nueve carreras impulsadas, para contrarrestar a Judge, quien se fue de 26-13 en la postemporada y se convirtió en el sexto jugador de todos los tiempos en batear al menos .500 en una sola postemporada.
La diferencia estuvo en los jugadores de apoyo. El utility de Toronto, Ernie Clement, registró tres juegos consecutivos de múltiples hits para terminar con 14-9 en la serie. El jardinero central Daulton Varsho conectó de 16-7. El receptor Alejandro Kirk conectó dos jonrones. En el cuarto juego, Addison Barger registró tres hits. Nathan Lukes añadió dos carreras, incluyendo un sencillo de dos carreras que aumentó la ventaja de Toronto a 4-1 en la séptima entrada. Myles Straw, quien salió de la banca, impulsó la última carrera con un sencillo en la octava. Como equipo, los Blue Jays batearon .338 con un OPS de .974 en la serie.
"No fallaron y anotaron, así se sentía, cada vez que tenían a un jugador en posición de anotar", dijo el receptor de los Yankees, Austin Wells. "Hicieron todo lo posible para poner la pelota en juego. Y estaban listos. Estuvieron concentrados desde el primer turno al bat. Fue impresionante".
Boone dijo: "Nos dominaron en esta serie".
Durante el último mes de la temporada regular, mientras su equipo mejoraba y acumulaba victorias, Boone no dudó en compartir que creía que el equipo de este año era el más talentoso en sus ocho temporadas en la cima. Se jactaba de su poder, velocidad, una defensa mejorada, una rotación robusta y un bullpen con varios veteranos probados. Visualizaba un camino hacia la Serie Mundial. No era el único.
"Todos pensábamos que éramos el equipo para ganar la Serie Mundial", dijo el segunda base de los Yankees, Jazz Chisholm Jr. "Pero el beisbol es beisbol. Todos sabemos que el beisbol puede cambiar de cualquier manera, en cualquier momento. El beisbol no favorece a nadie".