La rotación de lanzadores, lo mismo que el equipo de relevistas, aquejados por múltiples y graves lesiones en la campaña que concluye, son algunos de los departamentos que los Angelinos de Los Ángeles deben rediseñar, para volver a ser un equipo contendiente en el 2017.
La marca de 74-88 y el cuarto puesto en la División Oeste de la Liga Americana, han dejado a la entidad que administra Don Arturo Moreno, haciendo un recuento de lo que ha sido la temporada 2016, la décimo séptima bajo el timón de Mike Scioscia, para evaluar lo bueno, lo malo y lo feo del equipo, y en consecuencia, planificar algo que pueda ofrecer mejores resultados en la próxima temporada.
Scioscia, por cierto, alcanzó las 1490 victorias en su gestión, para ubicarse en el puesto número 23 en la clasificación histórica de los managers con más triunfos en Grandes Ligas.
Sin embargo, la campaña que ha concluido para los aureolados luego del último duelo del calendario regular, este domingo, no ha sido buena, a pesar de algunas individualidades muy destacadas, como son los casos de su estelar jardinero central, Mike Trout, quien vuelve a presentar números y una producción ofensiva como para ser considerado nuevamente al premio que se otorga al Jugador Más Valioso.
De la misma forma, el veterano Albert Pujols ha vuelto a saborear una temporada de grandes logros individuales, en cuanto a producción ofensiva, a pesar de sus achaques, particularmente, las dolencias en las plantas de ambos pies que han limitado su presencia en la custodia de la primera base, para desempeñarse mayormente a lo largo de este calendario, como bateador designado.
El pelotero dominicano sigue metiéndose a la parte más importante de la historia del béisbol de Grandes Ligas, luego de sumarle a su hoja de trabajo, en el presente año, 31 bambinazos, 19 batazos de dos esquinas y 119 carreras remolcadas, convertido en el quinto jugador en grandes ligas que logra hilvanar 13 temporadas con el centenar, o más, de carreras producidas.
Al mismo tiempo, Pujols ya está en el noveno lugar entre los máximos jonroneros de todos los tiempos, por detrás de Sammy Sosa (609), luego de alcanzar los 591.
Además, Albert se ha unido a un círculo muy exclusivo, el que integran beisbolistas de la talla de Hank Aaron y Barry Bonds, con una combinación de al menos 575 vuelacercas y 600 batazos de dos esquinas.
Por lo que corresponde a Trout, de tan solo 25 años de edad, en los últimos cuatro años ha estado entre los dos peloteros con el mayor número de votos de los periodistas, para el Premio al MVP y en la campaña que finaliza, logró 29 batazos para la calle, 5 triples y 32 dobles, además de impulsar el centenar de carreras, de anotar 123, de robarse 30 bases, para batear un promedio de .315.
El nativo de Nueva Jersey se ha convertido en el primer pelotero en la historia de la Liga Americana, con un mínimo de 25 cuadrangulares, 30 estafas y promedio de .440 de bateo, con corredores en base.
Encabeza la gran carpa en bases por bolas concedidas (116), lo mismo que en porcentaje de bateo con compañeros en los senderos (.441), mientras que en otras categorías como promedio de bateo, triples, bases robadas y otros aspectos de la ofensiva, se ubica entre los diez mejores del circuito.
Además de contar con este duo de titanes en su alineación, Mike Scioscia tuvo a otros peloteros que le entregaron cierta regularidad a su producción ofensiva, como son los casos del tercera base cubano Yunel Escobar, al torpedero curazaleño Andrelton Simmons, al jardinero dominicano Jefry Marte, junto a peloteros ya establecidos en la lineación del equipo, como son los casos del guardabosques derecho Kole Calhoun y C.J. Cron.
Lo que más afectó al equipo durante la presente campaña, fueron las bajas, por diferentes lesiones, de lanzadores, abridores y del bullpen, sobre quienes descansaban gran parte de las expectativas de éxito.
Garrett Richards quedó fuera por el resto de la campaña en el arranque mismo de la temporada. Luego se fueron a la enfermería, el zurdo Tyler Skaggs, Andrew Heaney y Nick Tropeano.
El cuerpo de relevistas también se vió mermado con la cirujía en la rodilla derecha a que fue sometido su taponero, Huston Street y con la pérdida de Cam Bedrosian.
Al mismo tiempo, los Angelinos se desprendían del abridor boricua Héctor Santiago y del relevista mexicano Fernando Salas.
Y para completar un cuadro desolador para este departamento, la llegada del otrora lanzador estelar de los Gigantes de San Francisco, el diestro abridor Tim Lincecum, no generó los resultados que de él se esperaban.
Es por ello que para la próxima campaña, Scioscia y la gerencia del equipo, deben barajar todas sus opciones, para integrar una rotación de respeto y un bullpen solvente.
Porque serpentineros como el propio Linceum, lo mismo que los veteranos Jered Weaver y C.J. Wilson, son elegibles para optar por la agencia libre, mientras que el arbitraje se presenta como opción para Garrett Richards, Matt Schumaker y Cory Rasmus, entre otros.
De igual forma, hay quienes consideran que los Angelinos requieren de un receptor de respeto y consistente con el bate al hombro, para darle otra dimensión a un departamento que, por ahora, cuenta con el venezolano Carlos Pérez y con el novato Jett Bandy.