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La aparición del próximo gran lanzador dominicano de MLB es cuestión de tiempo según Pedro Martínez

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¿Qué necesitan los lanzadores para ser el próximo gran lanzador? (4:51)

El inmortal de Cooperstown conversó con ESPN sobre eso que necesitan los lanzadores actuales para ser el nuevo lanzado élite (4:51)

La salud es la clave para lograr convertirse en un lanzador duradero y dominante en las Grandes Ligas, fueron las palabras que Pedro Martínez, Salón de la Fama de Cooperstown dijo a ESPN con respecto a lo que hace falta para que República Dominicana pueda ver a su próximo gran lanzador

Pedro Martínez es recordado como una leyenda por sus proezas como lanzador en las Grandes Ligas, las cuales el hicieron merecedor de convertirse en el segundo dominicano que lograba entrar al Salón de la Fama de Cooperstown. Uno de los lanzadores abridores más dominantes de su época y de la historia del deporte, dejó una marca imborrable durante su paso por MLB.

En 18 temporadas en las Grandes Ligas logró un récord de 219 victorias y 100 derrotas en 476 partidos. A lo largo de 2,827.1 entradas de trabajo tuvo una efectividad (ERA) de 2.93, terminando con 3,154 ponches para ocupar el decimotercer puesto histórico en dicha categoría. Pedro Martínez es el único lanzador de su generación (desde la década de 1990 en adelante) en lanzar al menos 2,500 entradas y tener una efectividad por debajo de 3.00. hazaña que no lograr hombres como Randy Johnson, Greg Maddux, Tom Glavine y John Smoltz, quienes fueron algunos sus contemporáneos.

La salida de “El Grande” de MLB dejó un importante vacío para la República Dominicana, ya que el país no ha vuelto a tener un lanzador abridor con un dominio que pueda ser comparable al del jugador. A pesar de contar con mucho talento en jugadores que en determinado momento fueron tildados como “el próximo Pedro Martínez”, el país no ha podido lograr establecer a otro abridor en la élite de las Grandes Ligas.

Pedro Martínez habló en exclusiva con ESPN al respecto de la situación, dando su parecer sobre lo que hay en cuando a material dominicano en este momento, las diferencias de cuando él era lanzador activo y lo que ha faltado para tener otro pitcher a ese nivel.

Sobre las diferencias en la forma en que los lanzadores se construían en su momento, frente a la actualidad, Martínez señaló que: “el béisbol ha ido evolucionando de maneras diferentes. Del modo en que se preparaban los lanzadores en mi tiempo era para que duraran un gran tiempo en las Grandes Ligas, no eran tan apresurados, no eran tan apurados en lo físico, no se necesitaba tanta juventud para estar en la MLB. Había una preparación diferente; eran (los lanzadores) más preparados el maratón (durar muchos años en la liga) que para la carrera rápida”.

“No es que el talento no esté, no es que la preparación falte, no es que no haya la calidad para ser un Pedro Martínez, un Juan Marichal, todo está ahí. ¿Qué pasa? Que los escogidos de Dios solamente los sabe Dios. La preparación con las condiciones físicas y atléticas las da Dios. Ese es mi creer, yo no te puedo explicar cómo mi hermano que es 6’5” (seis pies, cinco pulgadas), era más atlético, mucho mejor que yo en el principio de mi carrera y no pudo jugar dieciocho años, sino que jugó catorce porque se lastimó, pero yo seguí, me lastimé, pero seguí y esas son cosas inexplicables”.

“Yo veo a gente que es especial, por ejemplo, veo a Severino (Luis), él puede hacer lo que él quiera en Grandes Ligas, pero el señor debe darle su salud y él encargarse de cuidarla. Veo a López (Reynaldo) en White Sox, veo a tantos muchachos ahí, veo a Cueto (Johnny) a Castillo (Luis), veo a todos esos muchachos. Tienen el talento, se parecen a lo que yo vi de mí, pero también tiene Dios que estar con ellos y protegerlos, darle salud que es lo primero, el resto se hace, ¡uno se la busca!”, dijo con una sonrisa en el rostro Martínez.

Para Martínez, la clave del éxito de su carrera fue poner a Dios en primer lugar y luego él se encargaría de hacer el trabajo, exhortación que siempre hace a los demás peloteros, según comentó a ESPN.

“Yo decía “señor en tus manos encomiendo mi espíritu, que del resto me lo busco yo”. En el juego hay salidas, hay formas, hay maneras de jugártelas adentro, pero es con salud y cuando Dios te da eso, puedes lograr todo lo demás y eso es lo que entiendo que va a necesitar cualquiera que quiera ser grande o especial, va a tener que usar su salud y cuidarla, así como trabajar para eso, porque la salud se trabaja, hay que fajarse”.

“Ojalá y estos muchachos se diviertan con lo que es trabajar en su salud y que también añoren y cuiden y tengan a Dios presente. “Dios mío, dame salud que el resto me lo busco yo, que sea tu voluntad y no la mía”, así mismito deben hacer estos muchachos y que Dios los acompañe siempre y les dé la salud para que ellos puedan estar encima de esa loma, hay muchas salidas. Que busquen sinker, busquen curva, cambio, tiren rectas pegadas, recta afuera, localización, todo eso se logra con eso, salud, reconocimiento y cuidar lo que Dios les dio”, dijo entre risas el exjugador.