CLEVELAND - Las penurias ofensivas de los Cachorros de Chicago esta postemporada parecían ya haber quedado en el pasado, pero volvieron a la carga en el peor de los momentos, en su primer partido de Serie Mundial en 71 años.
En la derrota 6-0 a manos de los Cleveland Indians la noche del martes, los Cachorros hicieron triste alusión a su desempeño en los primeros seis juegos de la postemporada, donde registraron un promedio de bateo de apenas .185 y un promedio de embasarse de sólo .242.
No obstante, el sentimiento en el camerino visitante en Progressive Field tras el revés era uno muy distinto, enfocado en las oportunidades desperdiciadas contra un gran lanzador como lo es el único as restante en la diezmada rotación abridora de los Indios, Corey Kluber.
"Estábamos enfrentando a un ganador del Cy Young, a uno de los mejores derechos de la liga", sentenció el receptor venezolano Miguel Montero, quien se anticipa estará detrás del plato para el segundo juego de la serie con el abridor Jake Arrieta en la lomita.
"Este fue un partido diferente, Kluber tuvo un repertorio que hasta del banco se veía que era difícil batearle. Hay que darle crédito. De hecho creo que agarramos buenos turnos, aunque no pudimos dar el hit grande, después de Kluber vino [Andrew] Miller y vino [Cody] Allen y el resto es historia".
Montero hizo alusión al segundo y tercer partido de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional contra los Los Angeles Dodgers, donde los Cachorros fueron blanqueados de forma consecutiva en playoffs por primera vez en los más de 100 años de historia de la franquicia. El equipo incluso llegó a pasar 21 entradas al hilo sin anotar una sola carrera, su sequía de anotación en playoffs más larga en la historia.
"Me hizo recordar eso", dijo por su parte el cátcher Willson Contreras. "Pero es la primera vez que enfrentas a un pitcher que nunca has enfrentado".
"Influyó mucho el movimiento en los pitcheos que tiene Kluber; de verdad que se le mueve mucho la pelota", agregó el novato venezolano. "Hay que darle su crédito por lo que hizo, pero es la primera vez que lo enfrentamos. Si lo enfrentamos otra vez vamos a tener una idea de lo que hace".
Entre el as Kluber, el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, Andrew Miller, y el cerrador Cody Allen les recetaron nueve ceros a los Cachorros para tomar una ventaja temprana de 1-0 en la serie.
Las fallas en bateo fueron claras, con los Cachorros conectando un solo hit tras haber tenido 11 oportunidades con corredores en posición anotadora.
En esos primeros tres juegos de la serie contra Los Ángeles, Chicago bateó para sólo .125 (de 16-2) con corredores en posición anotadora. No obstante, en los últimos tres, se fueron de 39-12 (.308).
No obstante, cabe destacar que después de caer abajo 2-1 en la serie ante los Dodgers, los bates de Chicago tuvieron un impresionante resurgir ofensivo, donde sumaron un promedio de .303 (de 109-33) con nueve dobles, cinco cuadrangulares y un OPS de .873 en los últimos tres partidos.
El corazón de la alineación de los Cachorros, el segundo, tercer y cuarto bate (Kris Bryant, Anthony Rizzo y Ben Zobrist), que habían conectado sólo dos hits en 32 turnos (.063) con cuatro carreras impulsadas durante los tres primeros juegos de la Serie de Campeonato, batearon para .371.
Así fue que los Cachorros clasificaron a su primera Serie Mundial desde 1945, anotando 23 carreras en tres juegos.
Pero a pesar del resultado, el veterano receptor David Ross recalcó que los Cachorros siguen con la frente en alto.
"Igual que sucedió en L.A., todo el mundo ya nos estaba dando por eliminados después del tercer juego", sentenció Ross. "Estaban diciendo que éramos el peor mejor equipo del béisbol. Aquí nadie se está dando por vencido".
"Sé que vamos a estar bien", dijo por su parte el dirigente Joe Maddon. "[Los Indios] lanzaron muy, muy bien esta noche; Kluber estuvo excepcional".
"No estoy decepcionado por nada más que por el hecho que no ganamos", agregó el piloto de los Cachorros. "Salimos dispuestos a jugar. Se lanzó bien. En general, no estoy decepcionado. Yo sé que tuvimos 15 ponches, lo entiendo, pero la calidad de nuestros turnos al bate no fue mala".
Ahora con una desventaja temprana en la serie, Arrieta subirá a la lomita del Progressive Field en su intento de evitar colocarse en un hoyo de 0-2. Entre los 54 equipos que han tomado una ventaja de dos victorias a cero en una Serie Mundial, 43 de ellos se han coronado campeones.
"Trabajamos muy duro para llegar a este punto, y ahora es el momento de salir, pasarlo bien y tratar de ganar cuatro juegos de pelota", destacó Arrieta. "Lo que realmente se aprende con más experiencia en la postemporada es a ser más cuidadoso con los detalles, y no permitir que el oponente saque provecho de los errores mentales. A estas alturas de la temporada, el equipo que cometa menos errores es el que normalmente va a ganar".