CHICAGO -- Los Cachorros de Chicago de este año tienen talento y calidad en todas las facetas del juego, pero lo que diferencia a la tropa de Joe Maddon de versiones anteriores de los "adorados perdedores" que se acercaron a la tierra prometida es el carácter que, amén del talento, necesita un aspirante a ganarlo todo en las Grandes Ligas.
Por tercer partido consecutivo, Chicago pudo regresar en el marcador en las entradas finales, esta vez marcando cinco carreras en la octava para derrotar 8-4 a los Dodgers de Los Ángeles el sábado, en el arranque de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en Wrigley Field.
Bateando de emergente con el partido empatado 3-3, el receptor venezolano Miguel Montero bateó un cuadrangular con las bases llenas y Dexter Fowler le siguió con uno solitario para estremecer Wrigleyville, después que los Dodgers habían igualado la pizarra con un hit de dos carreras del mexicano Adrián González frente al cerrador cubano Aroldis Chapman en el octavo.
Chicago, que no juega en la Serie Mundial desde 1945 y no gana una desde 1908, ha ganado sus últimos dos encuentros anotando cuatro o más carreras en su último turno al bate.
El triunfo del sábado quebró una racha de siete reveses en la Serie de Campeonato, que comenzó en 2003 contra Marlins de Miami.
El martes anotaron cuatro veces en el noveno para borrar una desventaja de 2-5 y vencer 6-5 a los Gigantes de San Francisco, avanzando a la final de liga por segundo año consecutivo. En el juego anterior habían empatado en la novena, pero en el inning 13 mordieron el polvo de la derrota por primera vez esta postemporada.
"Dos en línea ahora. El juego en San Francisco fue muy similar al de esta noche en la parte final", dijo Maddon. "Nosotros jugamos duro durante nueve entradas, salimos a buscar 27 outs. Estoy complacido y realmente orgulloso de nuestros jugadores y como ellos manejan las situaciones difíciles".
Situación difícil fue la que le presentaron a Montero, quien estaba de 9-0 con bases llenas desde el 2 de julio y hasta estuvo en duda para integrar el roster de postemporada.
Sin embargo, en cuenta de 0-2 mandó un slider sin veneno del derecho Joe Blanton por encima de la verja del jardín derecho para el primer jonrón de su carrera en postemporada y el primer cuadrangular de bases llenas de un bateador emergente para ganar un partido en la historia de las eliminatorias de Grandes Ligas.
"Solamente estaba tratando de hacer contacto. Un hit era todo lo que necesitábamos, pero hice swing fuerte y la bola salió", dijo Montero, quien bateó para .216 en la temporada y promedia .190 con cuatro jonrones en 105 turnos como emergente en su carrera.
"De niño sueñas con estas situaciones. Para eso es que uno vive y juega", dijo el venezolano. "Es fácil batear un jonrón con las bases llenas en la primera entrada, cuando nadie está gritando y este es más especial, porque fue delante de esta fanaticada tan especial que tenemos".
El puertorriqueño Javy Báez y el antesalista Kris Bryant conectaron dos dobles en cuatro turnos cada uno y Fowler se fue de 5-2 con dos anotadas. Por los Dodgers, González tuvo dos imparables y dos carreras impulsadas y Andre Ethier bateó un jonrón de emergente.
"La ofensiva gana juegos, la defensa gana campeonatos". Ese antiguo aforismo del futbol americano encaja perfectamente para describir porqué los Cachorros se colocaron a tres triunfos de su primera aparición en el Clásico de Otoño en siete décadas.
Más que el pitcheo de Jon Lester y la ofensiva de Montero, Bryant, Báez y el resto, fue la superioridad defensiva de los locales que mantuvo a Chicago arriba de los Dodgers por todas menos una entradas.
Chicago venció por primera vez a Dodgers en postemporada tras haber sido barrido 3-0 en la Serie Divisional de 2008 en el único enfrentamiento anterior entre las dos antiguas y célebres franquicias.
Lester trabajó seis entradas de cuatro hits y una carrera en su 16a. salida en Playoffs, la segunda mayor cantidad entre todos los pitchers activos --detrás de las 21 que tiene su compañero John Lackey--, pero se fue sin decisión cuando Chapman permitió el hit de González con las bases llenas y dos outs en el octavo.
Los Cachorros tomaron la delantera del encuentro en la primera entrada contra el japonés Kenta Maeda. Fowler bateó sencillo abriendo el episodio y anotó desde primera base con un doble de Bryant que el jardinero izquierdo Howie Kendrick no midió adecuadamente.
Kendrick, quien defendió la intermedia casi exclusivamente los últimos l0 años, ha jugado mayormente en el prado izquierdo esta temporada.
En el segundo inning, la defensa de los Dodgers, otra vez, fue cómplice de la ofensiva de los Cachorros, esta ocasión para producir dos carreras para los locales.
Jason Heyward bateó triple por el jardín derecho, Báez bateó pegó un elevado rutinario que, sin embargo, cayó entre el torpedero Corey Seager y los jardineros Kendrick y Joc Pederson cuando el cuadro jugaba para tratar de impedir la carrera. Báez se metió hasta la intermedia para anotarse un doblete.
Báez avanzó a tercera por lanzamiento salvaje de Maeda y anotó en robo del plato cuando Lester falló en tocar la pelota y el receptor Carlos Ruíz lo atrapó en medio del camino. En lugar de amagar, Ruiz lanzó mal a la tercera base y cuando el antesalista Justir Turner le regresó la pelota, Báez había anotado.
El robo del plato de Báez fue el segundo de los Cachorros en postemporada y el sexto de la Serie de Campeonato desde su creación en 1969.
Mientras los Dodgers fallaban en ejecutar las jugadas defensivas, los Cachorros ofrecieron un recital, especialmente de Fowler en el jardín central, Addison Russell en el campocorto, Báez en la intermedia y Anthony Rizzo en primera bases para recordar a todo el mundo por qué fue el conjunto más defensivo de Grandes Ligas en la temporada regular.
"La defensa fue espectacular. Increíblemente buena y esa fue quizás la razón principal por la que ganamos el juego", indicó Maddon. "Seguro que el jonrón con las bases llenas de Miggy entra en la ecuación, pero nosotros atrapamos la bola bien. Hubo algunas bolas bien bateadas contra Jon que atrapamos.
"Hay que darle crédito a nuestra defensa. Amo nuestra defensa", agregó Maddon.
De acuerdo a Fangraphs.com, Los Ángeles fue el tercer mejor equipo a la defensiva en la Nacional en 2016 con 29 carreras salvadas (una fórmula que evalúa si los jugadores están por encima o debajo del promedio en término de sus aportes defensivos), detrás de San Francisco Giants (50) y, por supuesto, de los Cachorros (82).
Chicago fue tan bueno que superó por 32 carreras salvadas al segundo lugar de su circuito y por 53 al líder de la Liga Americana, Reales de Kansas City (29).
Individualmente, el torpedero Russell (19), el 1B Rizzo (11), el 2B Báez (12) y el RF Heyward (14) encabezaron sus respectivas posiciones, mientras que el receptor David Ross (8) solamente fue superado por Buster Posey (12). El 3B Bryant y el CF Fowler tuvieron buenos desempeños.
La defensa y el carácter, además de todos los otros atributos que poseen, es lo que convierte a los Cachorros de 2016 en un genuino candidato a ganarlo todo este año.
DENTRO DE LA SERIE
El ganador del juego 1
Desde que la Serie de Campeonato de la Liga Nacional fue alargada a siete partidos hace 30 años, el ganador del primer choque ha logrado avanzar a la Serie Mundial en 21 ocasiones. El último equipo que ganó la liga después de perder el juego 1 de la Serie de Campeonato fueron los Gigantes en 2012.
Choque del juego 2
El estelar zurdo Clayton Kershaw abrirá por los Dodgers y el derecho Kyle Hendricks por los Cachorros. Mientras Kershaw no comenzó un solo juego contra Chicago en toda la temporada, Hendricks tuvo 2-1, 3.15 en tres salidas contra Los Ángeles.
Báez y Bryant enrachados
El 2B puertorriqueño Javy Báez y el antesalista Kris Bryant han pegado al menos un hit en los primeros cinco juegos de la postemporada para Chicago. El récord de la franquicia es de seis y pertenece al dominicano Moisés Alou, quien lo hizo en 2003, y Michael Livingston en 1945. Incluyendo la temporada pasada, Bryant tiene seis juegos con hit en Playoffs.
Asistencia
Al primer partido de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional asistieron 42,376.
Durante la temporada, 3,232,420 (39,906 por juego) asistieron a Wrigley Field en lo que fue la quinta mayor asistencia de las Mayores y la cuarta mejor de la Liga Nacional.
Los Dodgers lideraron con 3,703,312 (45,719 por juego) en casa.