Las rachas están para cortarse. La frase trivial y remanida le calza de manera ideal al presente de Red Bull en la Fórmula 1. La escuadra de la bebida energizante acumula 15 triunfos en fila, contando la cita que cerró el ejercicio 2022 y las 14 disputadas en el actual torneo, con 13 festejos de su estrella Max Verstappen, las últimas diez enhebradas de forma consecutiva. El RB19, el modelo de la temporada 2023, cayó de manera perfecta en cada circuito que visitó la categoría. Hasta que llegó el urbano de Marina Bay, donde desde 2008 se disputa el GP de Singapur, esta vez anotado como la 16ª fecha (se suspendió Emilia Romagna, por eso es la 15ª competencia). Allí, el poderoso auto del team austríaco mostró falencias nunca vistas y la mayoría se relame con la chance de poder birlarle, al menos, un éxito.
Singapur, carrera que se vive por Star+, aparecía en la previa al arranque de la actividad como el eslabón más complejo de enlazar en la cadena de éxitos de Red Bull y su objetivo de ganar todos los Grandes Premios de la temporada. “Si vencemos en Singapur, existe la posibilidad de que podamos ganar todas las carreras. Tengo que decir que Ferrari y en particular Leclerc son especialistas allí”, anunciaba Helmut Marko, asesor del equipo campeón del mundo, antes de llegar a la pequeña ciudad estado asiática. Yas Marina era la peca que podía complicar la chance de seguir acumulando éxitos y el arranque en los ensayos mostró muy fuerte a los autos de la Scuderia, como había avisado Marko, con Carlos Sainz por delante de su compañero Charles Leclerc. Checo Pérez, séptimo, fue el mejor de Red Bull, mientras que el bicampeón, apenas fue octavo.
Para Red Bull, y especialmente para Max, Singapur no es un buen lugar. Si bien es cierto que el equipo del Toro Rojo es, junto con Mercedes, el equipo que más veces venció en el callajero (cuatro veces cada uno), tres de los festejos austríacos fueron los tiempos de dominio de Sebastian Vettel (2011, 2012 y 2013). Checo Pérez consiguió el cuarto éxito el año pasado, mientras que Verstappen sigue teniendo a Marina Bay del lado del debe.
Es cierto, apenas fueron los entrenamientos y la realidad se verá recién en la clasificación. Pero las señales que dio el neerlandés fueron claras: “"Estamos mucho peor de lo que esperábamos. No entendimos algunas cosas; tenemos trabajo que hacer. Sufrimos mucho con el equilibrio del coche. Probamos algunas cosas en la segunda práctica, algunas funcionaron y otras no. Intentaremos mejorar, pero la diferencia es bastante grande".
El andar del Red Bull fue malo y el bicampeón quedó a 732 milésimas de Sainz. Por primera vez en la temporada, el team de Milton Keynes se muestra “terrenal”. No es el imbatible equipo que sale a la pista y logra lo mejor cuando quiere. El RB19 se mostró lento y nervioso. Está siendo difícil con la parte trasera, sobre todo en los libres 2. Esperábamos que Ferrari estuviera fuerte, queremos recortar, pero será difícil”, explicó Pérez.
RESULTADO DE LOS ENTRENAMIENTOS
Ahora bien, ¿quién podría aprovechar la chance que está entregando Red Bull en Singapur? Los entrenamientos muestran que podría ser Ferrari. Ahora bien, que la Scuderia muestre poderío a una vuelta no es algo anormal. El gran problema para los autos de Maranello pasa por el ritmo de carrera, porque el SF-23 destruye los neumáticos. Y Singapur, precisamente, no es una pista amigable con el consumo de caucho, aunque la renovación que se hizo en el tercer sector, eliminando curvas de frenajes fuertes, es un alivio para las cubiertas.
Si Ferrari vuelve a sufrir en carrera, algo esperable, ahí están Mercedes, Aston Martin y McLaren al asecho. Las Flechas de Plata mostraron buen ritmo en la simulación de carrera, Fernando Alonso es el as de espadas de los autos verdes y, se sabe, en competencia saca lo mejor. Y Norris es el abanderado de los de Woking. Ese grupo de cuatro pilotos (el team alemán tiene a Lewis Hamilton y George Russell en la pelea) son los sabuesos que perseguirán esa presa llamada victoria en la Fórmula 1. Para el resto de la temporada, sacando Las Vegas que será un escenario nuevo y, por lo tanto, desconocido para todos, parece difícil que Red Bull se muestre tan falible como en Singapur. El urbano asiático parece ser la única ficha fuerte para que el resto haga su apuesta completa.