El monegasco, quien había dominado las prácticas del viernes, también marcó el mejor tiempo en el ensayo del sábado.
Un dominio tan abrumador como el que Charles Leclerc ejerció en las tres tandas de entrenamientos del GP de Mónaco sería el presagio de una pole y victoria asegurada, de no mediar nada raro. Pero en el intrincado callejero del principado todo puede ser raro. Si no que le pregunten a Lewis Hamilton, quien está en su 18ª carrera en la glamorosa ciudad y terminó el entrenamiento con su Ferrari golpeada y prendiendo velas para que los mecánicos lleguen a la clasificación. Entonces, todo lo que se vio hasta ahora, puede caer en saco roto antes el más mínimo yerro. Y Leclerc los ha tenido en Mónaco, como en 2021 cuando logró la pole y terminó con su Ferrari estrellada tras conseguir el tiempo. Y en 2022, en el GP Histórico, destruyó una Ferrari 312B3-74, que había manejado Niki Lauda. Por eso, Montecarlo siempre tiene una carta bajo el brazo, pero hasta ahora, lo del local es abrumador.
Cada vez que salió a pista se metió adelante, mejorando sus registros y dejando a todos lejos. ¿Cuántas veces habrá manejado por esas calles? Claro, es su casa, y les enseña a todos cómo se gira con un F1. El tercer entrenamiento lo tenía como líder, pero por las dudas, cuando ya quedaba poco tiempo en el reloj, metió otra vuelta abismal, con neumáticos usados (la degradación es muy baja aquí) y se convirtió en el único piloto que logró bajar los 70 segundos antes de la clasificación. Leclerc marcó 1m10s953 y le sacó 280 milésimas a su vecino Max Verstappen, El tetracampeón vive con su esposa Kelly Piquet y Lily, la hija de ambos, en Mónaco. Se ve que hay que vivir por acá para andar bien, porque Lando Norris fue tercero.
Ahora bien, visto los entrenamientos, la pole de Leclerc paga dos pesos. Y partir desde el primer lugar en Mónaco es meterse el 80% del triunfo en el bolsillo. Por más que la FIA haya tomado la decisión de armar un reglamento particular para esta prueba y obligar a todos a parar, de mínima, dos veces en boxes para cambiar neumáticos, picar en punta en el principado es clave. Por el momento, lo de Leclerc es abrumador. Y eso que había anticipado que no tenía muchas expectativas. Claro, falta lo más importante, la clasificación.
