Para efectos de la posición de ala cerrada en la NFL, existe un parteaguas muy claro. Su nombre es Tony Gonzalez.
En reconocimiento a su valía como el agente de cambio en la posición, Gonzalez fue enaltecido oficialmente este sábado al Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional.
"No tengas miedo y enfócate", declaró Gonzalez en su ingreso al recinto de los inmortales. "Creo [que el éxito] que está en tu corazón y en tu mente. Aprendí esto de ver a los grandes".
The final Bronze Bust reveal of the night! @TonyGonzalez88 an official member of the Pro Football Hall of Fame! #PFHOF19 | @Chiefs | @AtlantaFalcons pic.twitter.com/twmgdjcpt0
— Pro Football Hall of Fame (@ProFootballHOF) August 4, 2019
Procedente de la Universidad de California en Berkley, la NFL no tardó en darse cuenta de lo importante que fue para Gonzalez sus antecedentes en el baloncesto una vez que llegó al emparrillado.
Reclutado en la primera ronda con el turno N° 13 global por los Kansas City Chiefs, Gonzalez se ganó el puesto titular en su segunda temporada y para la tercera ya era un jugador de Pro Bowl y All-Pro, cuando impuso marca personal con 11 recepciones de touchdowns.
"Fui enviado a la banca dos veces durante partidos", señaló Gonzalez sobre el inicio de su carrera en Kansas City. "El entrenador me decía, 'Ve a sentarte en la banca, no estás jugando bien'. Fui abucheado por la afición local y con razón. Escribían de mí en el diario, decían, 'Este chico está a punto de ser un fiasco' y me dolió. Recuerdo estar en mi habitación llorando, deprimido, bebiendo, en un hueco profundo. Cuando más parezca que estás deprimido, más difícil es salir. Y yo estuve atrapado allí por un tiempo hasta que mi hermano me escribió una carta y me dijo, 'Oye, Tony, no sé qué hemos visto allá fuera, pero no eres tú. Vuelve a ser Tony, puedes hacerlo'".
En el 2004, Gonzalez lideró a la NFL en recepciones, hazaña que solamente Kellen Winslow y Todd Christensen habían conseguido antes desde la posición de ala cerrada.
Después de la campaña del 2008, Gonzalez decidió probar suerte en otro ambiente, mudándose mediante un canje a los Atlanta Falcons, donde jugó sus cinco temporadas finales. Se retiró al término de la campaña del 2013.
"Después que fui canjeado, volví para un juego en Kansas City", recordó Gonzalez. "Antes del partido me presentaron, lo que pensé que era muy especial. Entonces algo sucedió, uno de los más grandes momentos de mi carrera: los aficionados comenzaron a gritar por mí".
Solamente el nombre de un tal Jerry Rice está por arriba de Gonzalez en la lista histórica de la NFL en recepciones, con 1,549 sobre las 1,325 del recién inmortalizado.
Además, Gonzalez es sexto en la lista de yardas por recepciones (15,127), octavo en touchdowns por recepciones (111), y décimo en partidos iniciados (254).
Para todos los números que posee Gonzalez, probablemente su mejor aportación al juego es algo que no se puede cuantificar. A partir de Gonzalez --quien tenía la capacidad de alinear en cualquier parte de la formación, de bloquear a un liniero defensivo con la misma maestría que corría una ruta frente a un esquinero-- la NFL empezó a buscar una nueva especie de alas cerradas: jugadores con mayor atleticismo que sus predecesores, capaces de emplear su cuerpo para crear separación entre el defensivo y el ovoide, y que fueron mayor factor en zona roja, además de los requerimientos tradicionales.
"El éxito llega de todas las formas y tamaños, pero hay una diferencia, el éxito verdadero es más que ganar mucho dinero o ser reconocido como uno de los mejores en lo que haces", apuntó Gonzalez. "El verdadero éxito consiste en devolver. Se trata de la bondad, de la calidad de las relaciones, en encontrar alegría en la alegría de los demás. Créanme, he aprendido estas cosas de la manera difícil. Estos principios, combinados con hacer lo que realmente amas hacer, sin duda te convertirán en una estrella en el deporte más importante que existe, ese es el juego de la vida".
Hasta entre los inmortales hay niveles, y no todos los enaltecidos en Canton cambiaron el modo en que se juega su posición. Gonzalez fue uno de los pocos.