Cameron Wake sabe que no es el mejor amigo, un compañero idóneo para tomar un trago o un apoyo para sus conocidos en problemas románticos.
En realidad, el apoyador de los Tennessee Titans rechazará incluso la invitación a comer una hamburguesa con queso. Tampoco hay que acercarle una bolsa de papas fritas o a la francesa para una botana rápida. Ha comido de manera saludable por tantos años que el atún con semillas de girasol suena a la mejor comida que Wake puede imaginar incluso cuando se retire.
"Es una decisión que tienes que tomar para decir: 'Decido hacer esto y renunciar a aquello'", declaró Wake de 37 años y quien se dirige a su temporada N° 11 en la NFL. "Podría ser salir por las noches, podría ser beber, podría ser la comida. Lo que decidas que va a beneficiarte en tu camino. He tenido el mío e insisto, conozco chicos que no están jugando ahora... nombres conocidos cuando salí de la universidad y yo sigo aquí haciéndolo".
La NFL no es terreno exclusivo para los jóvenes. Desde los jugadores que superan los 40 años de edad como Tom Brady y Adam Vinatieri hasta aquellos cercanos a la cuarta década (Eli Manning, Philip Rivers y Terrell Suggs), todavía hay un lugar para los veteranos en el fútbol americano.
Sin embargo, una carrera larga en la liga requiere de mucha habilidad junto con sacrificio, la mentalidad correcta y un compromiso que nunca termina.
Wake, quien es también entrenador personal, hace lo que predica ante los clientes que quieren estar en forma. Come carne magra y vegetales, evita la comida frita, la procesada, dulces, frituras y queso. El menú no cambia una vez que la temporada termina, un método que el jugador cinco veces seleccionado al Pro Bowl ha seguido al menos durante los últimos 13 años.
Simplemente es un modelo de negocios más inteligente para el hombre que pasó un año como empleado hipotecario tras ser cortado como un agente libre no reclutado en el draft por los New York Giants en el 2005.
"Voy a elegir el largo plazo sobre el aquí y ahora, retrasar la gratificación, todas esas cosas", decretó Wake.
Brady cumplió 42 años el mes pasado y se dirige a su vigésima temporada como profesional, mientras que Drew Brees se convertirá esta campaña en el vigésimo primer mariscal de campo de 40 años o más que juegue en la NFL.
El pasador de los Patriots, quien se abstiene del alcohol, detalló su dieta y su método de ejercicio en "The TB12 Method" en el 2017. Se trata de una dieta que sustenta en Brady, seis veces campeón del Super Bowl, la creencia de que puede jugar hasta los 45 años.
Brees, quien cumplió 40 años en enero, sigue su propio régimen para dormir, comer, entrenar y recuperarse.
El entrenador en jefe de los New Orleans Saints, Sean Payton, dijo que los jugadores de ahora conocen mucho más sobre salud y nutrición.
"Cuando estás viendo a jugadores que juegan tan tarde en sus carreras al nivel que están jugando, te das cuenta de que hemos avanzado mucho más de lo que habíamos hecho hace 20 años", consideró Payton. "Todas las cosas que hace [Brees], relacionadas con su preparación para una temporada y que pasan desapercibidas, intervienen.
"Está en una gran forma física. Pasa todo un año entrenando, por lo tanto, no es sólo tomarse el verano libre... Hay muchas cosas que intervienen en lo que estás viendo en el terreno de juego".
Esta temporada será la décimo sexta para Manning (38 años), Rivers de Los Angeles Chargers, quien cumple 38 en diciembre, y Ben Roethlisberger (37) de los Pittsburgh Steelers.
En tanto, Adam Vinatieri es uno de 16 pateadores que han jugado a los 40 años o más en la historia de la liga. Cumple 47 el 28 de diciembre y está listo para convertirse en el tercer jugador de mayor edad en la NFL --sólo detrás de George Blanda y Morten Andersen-- al final de esta campaña.
Blanda y Andersen están en el Salón de la Fama.
Vinatieri ha aprendido una cosa al convertirse en el líder anotador en la historia de la liga durante 23 temporadas.
"No hay garantías, y cuando llegas a mi edad, estás absolutamente en lo correcto, tus días están contados", señaló.