De las pocas certezas que ofreció la Semana 1 destacan el aún más fortalecido poder ofensivo de los Kansas City Chiefs y el peligroso ataque vertical de los New Orleans Saints, pero, no todo lo que brilló es oro.
Así como los Chiefs y los Saints presumieron el músculo defensivo que los coloca como candidatos al Super Bowl LIV, también evidenciaron fallas defensivas que podrían entorpecer su camino al juego por el título de la NFL.
A darles tiempo… pero no mucho
Gracias a Patrick Mahomes y su elenco ofensivo, el debut de Steve Spagnuolo como coordinador defensivo de los Chiefs no es cuestionado. Aún.
Seis jugadas explosivas, es decir, de 20 o más yardas, incluidos pases de touchdown de 68 y 49 yardas a Sammy Watkins, ayudaron a Kansas City a salir de Jacksonville con un claro triunfo, sin embargo, su defensiva mostró en varias ocasiones el rostro de la unidad que fue un dolor de cabeza para el equipo en 2018.
Tras forzar la salida por lesión de Nick Foles, los Jaguars recurrieron a un novato, Gardner Minshew, para tomar el control de su ataque y el quarterback de primer año realmente puso en problemas a la defensiva de los Chiefs tras completar sus primeros 13 pases para superar claramente la marca de nueve envíos completos para un pasador en su debut en la NFL y que pertenecía a Brad Johnson, de acuerdo a Elias Sports Bureau.
Además, Minshew registró el porcentaje de pases completos más alto (88.0) para un quarterback en su debut en la historia de la NFL.
Si bien la defensiva de los Chiefs provocó dos pérdidas de balón, también permitió tres incursiones en zona roja en series ofensivas que recorrieron 66, 80 y 79 yardas, además de touchdowns en series de 70 y 60 yardas.
Sí, la defensiva de Spagnuolo permitió menos de 28 puntos, pero, largas series ofensivas y que un quarterback novato luzca como un veterano no es la mejor carta de presentación.
A su vez, la defensiva de los Saints parece no haber resuelto del todo los problemas en el perímetro que le afectaron la campaña pasada, pues en sólo dos jugadas, pases de 38 yardas y de touchdown de 37 yardas, Deshaun Watson les empató el marcador con 43 segundos por jugar del duelo que finalmente ganaron con drama el lunes por la noche.
¿Estrella fugaz?
Dak Prescott tuvo el que es el juego más productivo o redondo de su carrera, pero, ¿sí se fijaron contra quién fue?
Prescott lanzó para 405 yardas para registrar el tercer juego con 400 o más yardas por aire para un quarterback en la historia de los Dallas Cowboys. Los dos primeros son de Tony Romo. También registró el cuarto juego de 400 o más yardas con cuatro pases de touchdown en la historia de la liga y primero desde 2016.
El pasador texano, que está a la espera de un inminente nuevo y multimillonario contrato, hizo todo esto ante una defensiva de los New York Giants que desde 2018 no figura entre las mejores de la NFL sino muy cerca de las peores (24 en defensiva total en 2018, 23 contra el pase y 20 contra la carrera).
Tanto se ha hablado de la inconsistencia de Prescott, que un buen juego no puede ni debe cambiar la percepción que se tiene sobre él.
Calma, Lamar
Después de completar 7 de 20 pases para 324 yardas y cinco touchdowns, Lamar Jackson dijo, en tono irónico, “No fue un mal día para un corredor”.
Bien por el quarterback de los Baltimore Ravens por hacer bien su trabajo, que es lanzar el balón, pero, que tampoco salga muy ufano a burlarse de las críticas o análisis que señalan, con justa razón, que es un pasador que corre a la menor provocación.
La estadística más reveladora de que Jackson, quizá, se tome más en serio su rol como pasador es que completó tres de cuatro envíos para 84 yardas y dos touchdowns en pases con marca estrecha al receptor, es decir, con separación de una yarda o menos del defensivo. En 2018, en este tipo de jugadas, completó ocho de 30 pases para 71 yardas sin anotación.
Además, cuatro de sus pases de touchdown los lanzó en sus primeros nueve envíos del juego. De acuerdo a Elias Sports Bureau, Jackson se convirtió en el primer quarterback que lanza cuatro touchdowns en sus primeros 10 intentos de una temporada desde que Jeff Kemp lo hizo con los Seattle Seahawks en 1987.
Decíamos en El Plan de Juego (los pronósticos para la Semana 1) que el duelo ante Miami le serviría a Jackson para mostrarse como el quarterback que debe ser y lo hizo.
Sólo que no olvide que lo hizo ante la versión 2019 de los Miami Dolphins y que no encontrará las facilidades que encontró ante ellos en el resto de la campaña.