DALLAS – Los Dallas Cowboys comenzaron la temporada con una explosividad ofensiva pocas veces vista los últimos años.
Han anotado más de 30 puntos en cada uno de los tres partidos que disputaron para sumar 97, que representan 47 más que a estas mismas alturas de la campaña anterior.
Los Cowboys sólo han permitido dos capturas, comparadas con las 11 que sufrieron en los primeros tres partidos de 2018, en los que tenía marca de 1-2, después de jugar contra los Carolina Panthers, New York Giants y Seattle Seahawks; este último, el único que fue a playoffs, aunque fuera como comodín.
En tres partidos y sin haber hecho pretemporada, Ezekiel Elliott suma más yardas que la temporada pasada, que coronó como líder entre los corredores de la NFL.
No es casualidad. La línea ofensiva está sana y, sobre todo, reforzada por el centro All-Pro Travis Frederick, quien faltó todo el año anterior por enfermedad, el Síndrome Guillain Barré. Y ésta es la primera campaña completa de Marc Colombo como entrenador principal de la unidad.
“Estos grandulones están sanos y en gran forma “, dijo Elliott este miércoles en el vestidor de los Cowboys. “Tener a Travis de vuelta hace diferencia en todos aspectos. Puede leer la defensa desde que vamos caminando a la línea de scrimmage, es un líder natural y un gran bloqueador.
“Es el líder de una línea que puede ayudar en todas circunstancias“, agregó. "Esos muchachos grandotes dan miedo allá afuera, son inteligentes, saben hacer su trabajo y facilitan el mío en todos aspectos, pueden bloquear en las carreras y proteger al quarterback muy bien“.
Los Cowboys están terceros en yardas ganadas por carrera. El domingo pasado tuvieron, por primera vez desde 1998, en los tiempos de Emmitt Smith, dos jugadores que superaron las 100 yardas por carrera en el mismo partido, Elliott y el novato Tony Pollard.
“Para mi es buenísimo tener dos corredores que podamos repartirnos el trabajo“, mencionó Elliott. “Que seamos el 1-2 con estilos diferentes para las defensivas. En el último cuarto entró Tony y aprovechó sus oportunidades. Tuvo un par de muy buenas corridas con mérito propio y cerró el juego“.
“Es muy bueno tener a Tony de respaldo“, agregó. “Me da oportunidad de estar más fresco al final de los partidos y cuando lleguen los juegos finales de la temporada“.
Frederick aseguró que se siente bien, que ha ido encontrando su fortaleza y ritmo en el campo de juego desde que llegó al campamento de pretemporada.
Reconoció que aún tienen que mejorar en la ejecución y en evitar los errores mentales del partido como unidad, ya que han sufrido demasiados castigos, que incluso les han quitado anotaciones.
“Nos sentimos orgullosos de cualquier éxito que tenga el juego por carrera“, dijo Frederick. “Como línea ofensiva tu trabajo es hacer exitoso el juego por tierra y proteger a tu quarterback para que sea exitoso.
“Aún tenemos un largo camino por recorrer en nuestra ejecución, pero es un buen comienzo para nosotros en la temporada“, añadió.