Se podía oír la emoción de Neville Gallimore a través dela pantalla de la computadora. Las palabras salieron de su boca momentos después de que los Dallas Cowboys seleccionaran al tackle defensivo en la tercera ronda (N° 82 global) del draft de la NFL de 2020.
"Un tipo de alto esfuerzo. Un tipo de mil usos. Un tipo que también es disruptivo y puede apresurar al quarterback o un tipo que puede detener la carrera", dijo Gallimore, describiéndose a sí mismo. "Lo que necesites, lo que quieras de mí, lo haré justo así y lo haré lo mejor que pueda. Y cómo me describo a mí mismo, de nuevo, es como un proceso inacabado. Siento que mucha gente entiende que mi techo es muy alto, y lo sé. Una vez más, el mejor futbol americano aún no ha salido de mí, pero vendrá. Vendrá pronto."
Los jugadores de la NFL no suelen venir de Ottawa, Canadá. Es el tercero de Ottawa en ser seleccionado, uniéndose a Jesse Palmer (cuarta ronda, New York Giants, 2001) y Christo Bilukidi (sexta ronda, Oakland Raiders, 2012).
El camino de Gallimore a los Cowboys lo llevó de Ottawa a la Canada Prep de Niagara Falls, y luego a Oklahoma.
Tim Baines es un escritor de deportes por oficio, pero fue el entrenador de fútbol americano en la St. Patrick's High School por las dos primeras temporadas de Gallimore. Cada primavera, iba a la St. Patrick's Intermediate School y se reunía con los chicos de octavo grado hasta que le dijeron que necesitaba conocer a este estudiante de séptimo grado que ya podía clavar un balón de baloncesto.
Fue Gallimore. Baines sabía que Gallimore podía ser especial.
En el octavo grado, Gallimore recorría la corta caminata a la preparatoria para ver la práctica del equipo de fútbol americano.
"No sé si lo hacía todos los días, pero regularmente se paraba a un lado y observaba", dijo Baines, quien trabaja para el Ottawa Sun. "Nunca había visto eso. Los chicos en el octavo grado, tienen mejores cosas que hacer. Vete a casa y juega o juega videojuegos. Sólo miraba y hablaba con algunos de los niños mayores. No podía esperar, así que cuando apareció el primer día de práctica en el noveno grado, estuvo allí media hora antes que los entrenadores, esperándonos. Ese es el tipo de compromiso y disciplina que tenía. Era más maduro que sus años”.
Gallimore quería jugar fútbol americano universitario en los Estados Unidos. Llamar la atención en Canadá es difícil por una variedad de razones --nivel de competencia, reglas diferentes-- por lo que se pasó a Canada Prep un año después de conocer la escuela.
Él y algunos amigos hicieron el viaje de cuatro horas a Niagara Falls para un Combinado en la escuela, que fue diseñado para ayudar a los jugadores canadienses a obtener exposición.
"Es un tipo primero los negocios", dijo Geoff McArthur, entrenador de Gallimore en Canada Prep. "Tiene una gran combinación de seriedad, pero mantiene un gran sentido del humor. Su enfoque y meta N° 1 es contribuir y ser responsable de lo que se supone que debe hacer. Es muy consciente de la magnitud de la posición en la que se encuentra. Y se ha estado preparando para ello durante mucho tiempo".
Canada Prep jugó contra equipos americanos con reglas de fútbol americano estadounidenses. Cuando Gallimore apareció en 2013, McArthur dijo que la mayoría de sus compañeros pensaban que era entrenador.
"Dejó su bolso de gimnasio en el pasillo y se puso muy serio --y es el chico más bobo de la historia-- pero se puso serio y dijo: 'Entrenador, estoy aquí para reportarme y ¿cuándo podemos ir a la sala de pesas?'", McArthur dijo. "Eso es lo que quiere hacer. Eso es lo que es. Se emociona por la oportunidad de trabajar".
McArthur, quien fue un receptor abierto en California con Aaron Rodgers como su mariscal de campo, sabía que Gallimore también sería especial. Dos jugadas en el mismo partido contra un equipo de Pittsburgh verificaron su creencia.
"Este chico que va a Temple, recoge un balón suelto en una patada extraña y va por la banda", dijo McArthur. "No hay manera de que sea atrapado. Estoy tirando mis auriculares. De la nada Neville toma un ángulo y simplemente se lo comió. Pesa 265 libras y se tragó a este chico. Luego bloquea una patada y atrapa la pelota. Todo a la vez. Nunca lo había visto antes. Fue tan rápido. Marcaron la jugada como muerta, pero él habría anotado".
Pero en defensiva, Gallimore sobresalió.
"No entramos con la idea de convertirlo en un erudito del fútbol americano", dijo McArthur. "Sólo queríamos usar su atletismo, presionar al mariscal de campo. Y fue brillante en eso. Lo teníamos como un extremo defensivo de pie, pesando 265 libras. Nunca puso la mano en el suelo, incluso cuando llegó a 285”.
Gallimore se convirtió en el primer canadiense en ser seleccionado para jugar en el U.S. Army All-American Bowl, aunque una lesión en la rodilla lo mantuvo fuera del juego. Eligió Oklahoma, pero adaptarse al fútbol americano universitario fue una tarea difícil.
"Simplemente porque nunca tuve un entrenador de línea defensiva, y nunca tuve un libro de jugadas", dijo Gallimore. "Luego básicamente establecerme una vez que llegué a Oklahoma teniendo todas estas cosas. Obviamente, tuve que convertirme en un estudiante del juego".
El 2015 fue temporada redshirt, pero terminó iniciando 38 partidos en su carrera, incluyendo los 27 posibles en sus últimas dos temporadas. Terminó con 8.5 capturas y 18 tacleadas para perdida, y fue nombrado un primer equipo All-Big 12 como senior.
"Cuando miras a un tipo con ese atletismo y esa rapidez, la capacidad de penetrar espacios, va a ser eficaz tanto en el juego de carrera como de pase", dijo el coordinador defensivo de Oklahoma, Alex Grinch. "Pero en esta época si no puedes apresurar al mariscal de campo, tu papel en cualquier nivel será minimizado".
La temporada pasada fue la primera de Grinch en Oklahoma, viniendo de Ohio State. Mientras veía el atletismo de Gallimore, literalmente vio demasiado de él. Gallimore bajó 30 libras en la temporada baja para adaptarse a los cambios que Grinch estaba trayendo, pasando a 301 libras.
Grinch señaló las dos capturas de Gallimore contra Texas en la Red River Rivalry del 2019 como un ejemplo de la rapidez de Gallimore, pero fue una jugada contra Texas Tech que los entrenadores le mostraron a todo el equipo.
"El mariscal de campo de Tech estaba corriendo, rompe el bolsillo y ahora está a varios metros dentro del campo", dijo Grinch. "[Gallimore] lo persigue, provoca el fumble y un robo de balón para nosotros. Eso es indicativo de su capacidad para correr y golpear, de lado a lado”.
Una de las primeras paradas como entrenador de Grinch fue en la Universidad de New Hampshire, donde reclutó a niños canadienses. Los entrenadores allí tenían algo claro sobre los jugadores nacidos en Canadá: les tomaba tres años ponerse al día con el juego.
"Por eso creo que su mejor fútbol americano está por delante de él", dijo Grinch.
Hace aproximadamente un año, Gallimore regresó a St. Patricks, donde Bilukidi también asistió pero no jugó fútbol americano, y Baines dijo que era como el flautista de Hamelin.
"Cuando quieres inspirar a los jóvenes jugadores de fútbol americano y sacarlos a la práctica, sólo tienes que señalar a un tipo como Neville Gallimore", dijo Baines. "Mira a este tipo. Estaba comprometido. Mira dónde está ahora. Esa es la influencia que puede tener en las mentes de los de 14, 15 años. Hay un montón de buenos jugadores aquí que quieren jugar NCAA División I, pero simplemente no sucede para ellos. Pero cuando puedes decir, 'Este tipo lo hizo, puedes hacerlo', eso tiene significado".