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Futbolistas detenidos en Panamá por supuesto amaño de partidos

La Fiscalía Primera contra la Delincuencia Organizada y la Policía Nacional llevaron a cabo los arrestos como parte de la 'Operación Garra', relacionada con la denuncia de la Fepafut


Las autoridades panameñas detuvieron este martes a, por lo menos, dos jugadores y a un exfutbolista por el supuesto amaño de partidos en la Liga Panameña de Fútbol (LPF) y en la Segunda División de Panamá (Liga Prom), después de que hace un año la propia Federación Panameña (Fepafut) denunciase que llevaba tiempo tratando de combatir esta lacra.

La Fiscalía Primera contra la Delincuencia Organizada y la Policía Nacional llevaron a cabo los arrestos como parte de la 'Operación Garra', relacionada con la denuncia de la Fepafut "en contra de jugadores que estaban amañando partidos en la liga profesional, LPF, y en la Liga profesional Prom", explicó en un mensaje en vídeo el Fiscal Superior contra la Delincuencia Organizada, Emeldo Márquez.

"Tres personas han sido aprehendidas el día de hoy, dos jugadores actuales de la liga LPF y un exjugador de la liga LPF, quienes en las próximas horas serán llevados ante un juez de garantías a fin de legalizar la aprehensión (...) por un delito contra el orden económico, en la modalidad de delito financiero", detalló Márquez en una rueda de prensa posterior.

Los individuos arrestados "ofrecían y prometían a jugadores actuales de la liga, montos de dinero que oscilaban entre los 1,500 dólares hasta los 4,500, a fin de que tuvieran resultados en los partidos por tiempo, o resultado final", afirmó, unas cantidades que eran pagadas "inmediatamente culminaban los partidos (...) a los jugadores que participaban en estas situaciones irregulares".

Este delito, anotó, tiene una sanción que va de los 2 a 4 años de prisión, y aunque la mayoría de los pagos se hacían "en efectivo", también se utilizó el pago a través de moneda digital, en estos casos de Bitcoin.

"No tenemos algún club deportivo directamente involucrado, alguna junta directiva o algún patrocinador", subrayó, aunque dijo que no descartan arrestos de otros jugadores o de personas externas a la liga que estén vinculadas con este delito que implicó "varios juegos", en los que "se dieron resultados muy concretos".

"Un hecho histórico"

La Fepafut aseguró, en un comunicado, que este martes se dio "un hecho histórico" en el futbol panameño "con la aprehensión de algunos jugadores y un exjugador con fines de una investigación penal" por casos de manipulación de partidos, una situación que había denunciado ya el presidente de la Federación, Manuel Arias, el 17 de agosto de 2023.

"Desde este momento, las personas involucradas quedan suspendidas temporalmente de toda actividad que tenga que ver con el fútbol federado en Panamá mientras continúen las investigaciones del Ministerio Público", anunció la Fepafut.

Y anotó: "La Federación Panameña de Futbol quiere dejar claro que se toma muy en serio todos los temas relacionados a la integridad del deporte y reitera su posición de cero tolerancia contra las malas prácticas en el futbol".

Este martes, en la rueda de prensa con el fiscal, Arias dijo que buscan mantener "el futbol limpio y transparente", y hoy se dieron "los primeros pasos en esta investigación", en una tarea que pretende "acabar de una manera importante este delito, (...) que puede ser la punta del iceberg".

"FIFA está al tanto de todas las investigaciones, de todo lo que se ha hecho", aclaró.

Hace un año, Arias ya había advertido durante otra rueda de prensa que "muchos jugadores" habían sido separados o suspendidos por su posible implicación en estos amaños, y que llevaban dos años y medio, con la creación de una Oficina de Integridad en la Fepafut, tratando de combatir algo que "es parte de la vida del futbol" en todos los países en donde este deporte se profesionaliza.

La polémica había estallado días antes en el país centroamericano, después de que el entrenador anglo-panameño Gary Stempel denunciara que hacía más de un año que en Panamá se producían amaños de partidos, algo que definió como "una crisis del futbol panameño".