Una foto del fisio de italiano Jannik Sinner con una venda en su dedo meñique durante Indian Wells se ha hecho viral en las últimas horas como prueba de que la versión del tenista, en la que asegura que el clostebol llegó a su cuerpo debido a un masaje, concuerda con la sentencia de la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA), que le declaró inocente pese al doble positivo en abril.
Se trata de Giacomo Naldi como protagonista y la contaminación se habría producido, según el equipo del tenista, de manera transdérmica, en un masaje sin guantes, de ahí la ínfima cantidad encontrada en el organismo del italiano que dio dos controles positivos de antidoping aunque sin sanciones deportivas de por medio.
"Tras cada prueba positiva, se le aplicó una suspensión provisional. En ambas ocasiones, Sinner apeló con éxito la decisión y, por lo tanto, ha podido seguir jugando", informó el organismo, independiente de la ATP.
Darren Cahill salió a intentar acallar el debate en una entrevista con ESPN: "Jannik nunca haría nada intencionadamente. Se encontró en una situación desafortunada y la verdad salió a la luz. No hubo culpa ni negligencia, sólo esperamos poder dejar todo atrás".
Y, además, justificó el motivo por el que no fue suspendido: "La razón por la que pudo seguir jugando después de la breve suspensión provisional fue que podían señalar dónde ocurrió el accidente y explicar lo que pasó con el spray".
Sinner, al margen del debate por el momento, solo se expresó en el comunicado de su equipo: "Ahora dejaré atrás este período difícil y profundamente desafortunado. Seguiré haciendo todo lo posible para garantizar que sigo cumpliendo el programa anti-dopaje de la ITIA".
La decisión de la ITIA le permite participar en el próximo US Open, en el que seguramente será consultado como todo el arco tenístico por completo.