La lógica primó este martes en el ATP 500 de Beijing, donde el tenista italiano Jannik Sinner (1°) superó 6-3 y 7-6 (3) al local Bu Yunchaokete (96°) para asegurar su décimo enfrentamiento versus el español Carlos Alcaraz (3°), segundo en una final.
Sin embargo, el reinante campeón del Abierto de Australia y US Open necesitó más de dos horas para deshacerse del nacido en Xianjing, verdugo de Lorenzo Musetti (18°) y Andrey Rublev (6°) en las instancias previas, quien se presentó en sociedad en las últimas dos semanas al aprovechar las invitaciones de la organización y meterse entre los cuatro mejores en Hangzhou y en la capital de su país.
"Tuve un partido muy duro. Creo que al principio ambos estuvimos intentando entender un poco la manera de jugar porque era la primera vez. Tuve varias oportunidades en el segundo set en los juegos al resto, pero no pude aprovecharlas. Bu es un jugador muy bueno”, reconoció el nacido en San Candido sobre el incipiente diestro, de 22 años, que escalará hasta el puesto 69 del ranking.
En sintonía, el dueño de 16 trofeos, seis durante la actual temporada, continuó con los elogios hacia el asiático: "Vi un poco de su partido contra Andrey para entender un poco cómo jugaba. Pero cuando sientes su pelota es diferente. Sentí que estaba en todas partes. Es duro enfrentarle, ha hecho buenos resultados en el último mes. También es muy joven, tengo la sensación de que lo vamos a ver más seguido en los escenarios más grandes".
“Es un jugador muy sólido. Estuvo manteniendo su nivel durante todo el partido, lo que a veces es difícil de ver. Normalmente se tienen más altibajos. No tiene realmente grandes debilidades. Tiene derecha, revés, buen servicio. Debes ganarte cada punto que juegas, físicamente es bueno. Está abriéndose camino un poco este año, espero que siga así”, concluyó el pupilo de Simone Vagnozzi y Darren Cahill, que intentará revalidar exitosamente un título por segunda ocasión.