El Masters 1000 de Monte-Carlo, primer torneo de ese nivel del año en canchas lentas, ya tiene su cuadro definido, con el panorama de las figuras, y los tres latinoamericanos que figuran en la llave ya conocen su situación de cara al comienzo de la lucha en el tradicional Principado de Mónaco.
Diego Schwartzman y Guido Pella son los representantes argentinos, mientras que Cristian Garin el hombre a seguir por los fanáticos chilenos. El Peque y el Tanque figuran como preclasificados, pero sólo el primero, al ser uno de los ocho primeros, tendrá libre la primera ronda.
Schwartzman es el N°9 del mundo y fue sorteado en Monte-Carlo como séptimo sembrado, debido a bajas de peso, como las del austríaco Dominic Thiem (4°) y del suizo Roger Federer (7°). Por lo tanto, el líder del tenis de América Latina iniciará su aventura en la segunda rueda, frente el ganador entre el noruego Christian Ruud y la joven promesa danesa Holger Rune.
En caso de avanzar a octavos de final, el porteño se podría medir con el español Pablo Carreño Busta o el ruso Karen Khachanov y ya en cuartos aparecería el ruso Daniil Medvedev, segundo favorito, quien ganó sus 10 títulos en superficie dura y aún le falta rendir en gran nivel en arcilla.
Por su parte, Garin, N°20 del ranking ATP, es el 16° y último cabeza de serie del certamen monegasco. El chileno arrancará en primera ronda frente al canadiense Felix Auger-Aliassime, que estrenará como entrenador al español Toni Nadal, el histórico coach de Rafa.
Si lo supera, Garin jugaría con el australiano John Millman o el francés Ugo Humbert, con el griego Stefanos Tsitipas como candidato por ese sector del cuadro para ser su adversario en octavos, aunque deberá superar en la apertura al promisorio italiano Lorenzo Musetti o el ascendente ruso Aslan Karatsev.
En tanto, a Pella le tocó presentarse contra el invitado especial francés Lucas Pouille y, si avanza, le tocaría el francés Gael Monfils, 10° favorito, o el español Pablo Andujar.