LOS ÁNGELES - Kobe Bryant lo dio todo en el último encuentro ante su archirrival, Boston Celtics, tras 34 puntos en 33 minutos de juego, de los que 12 fueron desde el perímetro (4-de-11). Los Angeles lakers no pudieron llevarse la victoria, a pesar de ello, en el aspecto individual, Kobe se tomó la cita muy en serio, tanto que se convirtió en el jugador más destacado.
La rivalidad entre los Lakers y los Celtics cuenta con tres etapas bien diferenciadas. Por un lado, las seis Finales que disputaron entre 1961 y 1969 que acabaron con derrotas laguneras. Por el otro, las de los años ochenta (no lograron el anillo en 1984 mientras que sí lo alcanzaron en 1985 y 1987. Sin embargo, Kobe vivió en sus carnes dos: la derrota en 2008 y la victoria en 2010, éste último, el mayor logro de su carrera deportiva según afirmó al concluir el encuentro.
"Fue el mejor momento de toda mi carrera", subrayó tras reconocer cómo las Finales de 2008 le hicieron más líder.
"Significa todo para mí (la rivalidad con Boston). En 2008 en contra de ellos es un momento de mi carrera que me preparó mucho para ser un líder y cómo ganar otros campeonatos", reconoció.
La del domingo fue la última ocasión en la que escuchará los improperios del público contra los de Massachusetts y Kobe supo vestirse de gala. No estuvieron Kevin Garnett, Paul Pierce o Rajon Rondo, aunque sí intercambió algunas palabras poco amistosas con jugadores como Isaiah Thomas, quien se erigió como el mejor de su equipo con 26 puntos y seis asistencias.
"Es un gran sueño para mí jugar contra Boston. Finales dos veces. Mirando la rivalidad (Larry) Bird y Magic (Johnson) todos estos año cuando era un chiquito. Y ahora terminar mi carrera y el último partido contra Boston es un sueño para mí", agregó.
Kobe llegó a tono al encuentro después de tres días de descanso en los que primaron los ejercicios de estiramiento y los tratamientos con hielo. Su próximo compromiso será ante Los Angeles Clippers el martes y el miércoles. A continuación viajará a Nueva Orleans, Houston y Oklahoma antes de disputar el último encuentro de la temporada frente a Utah Jazz en el Staples Center el miércoles 13 de abril.